¿Os gusta la Nutella?
Es buena eh? Generalmente a la gente le gusta mucho. Y la verdad es que no tiene mucho misterio. Es basicamente chocolate y avellanas (bueno y cuando la compras hecha, aditivos, estabilizantes, etc que no conocemos muy bien). Pero en su esencia es chocolate y avellana.
La verdad no es dificil hacerla en casa, y lo mejor, podéis hacer poquito - que sino ya nos conocemos, nos comemos el bote entero eh?
Os doy la receta para hacer un recipiente pequeño.
Ingredientes:
- 1/2 paquete de avellanas tostadas. Si no estan tostadas, habrá que tostarlas. En todo caso, quitar trocitos de cáscara que queden.
- 1 par de cucharadas de aceite de girasol
- 1/3 de tableta de chocolate para fundir Nestlé (también queda muy bueno, y a veces hago, con chocolate negro, con chocolate sin azúcar para diabéticos etc)
¿Cómo se hace?
1. Triturar muy muy bien las avellanas con el aceite de girasol en el robot o batidora. Hay que dedicarle el tiempo que haga falta para que se transforme en una pasta, sin trocitos evidentes de avellana - a no ser que os guste así, hay gente que lo prefiere así.
2. Mientras tanto, fundir el chocolate. Opciones, hacerlo en baño-maria o microondas. Yo prefiero el microondas, pero entonces hay que ir poquito a poco para evitar pasarse y quemar el chocolate. Hacerlo a baja potencia y luego ir parando cada 30 segundos para ver que tal está.
3. Mezclar muy bien el chocolate fundido con la pasta de avellanas y llevarlo a la nevera.
No hay más misterio que esto ;) no tengo fotos porque la verdad nunca me dura lo suficiente para hacer fotos.
Ya me contaréis como os quedó. salut!
Mis pequeñas incursiones al mundo de la culinária, que reinvento continuamente usando como ingrediente principal el amor, y como segunda herramienta, la base científica de ciertas cosas para modificarlas.
diumenge, 22 de desembre del 2013
Crepes con nutella y nata (sin gluten)
De un tiempo a esta parte, por recomendación médica, me tocó aprender a vivir sin gluten. En mi particular visión, no deseo que eso sea un motivo para cocinar siempre por separado en mi casa (con gluten x sin gluten), pero sí un peldaño más en el camino de aprender a cocinar de una manera más sana y natural, sin precocinados y sobre todo, aprender alternativas para cocinar igual - o casi - para todos.
Y he descubierto que, cuando se pone un poquito de voluntad, tampoco es tan dificil. Todo es aprender y acostumbrarse (por ejemplo a los tiempos de horneado, que no son iguales) y al final resulta bien. Es mucho más dificil cuando uno sale a comer fuera pero la verdad es que en casa no es complicado.
Ayer estaba haciendo la cena y pensaba, que ya que habia hecho nutella casera (muy fácil, la colgaré en otro post), que me iria además genial hacer unas crepes y servirlos con la nutellla y un poquito de nata gluten-free. Veréis lo tremendamente facil que es:
Ingredientes (me ha rendido 4 crepes):
- 250ml de leche (bien, tengo que decir que como también intento reducir la leche, pues puse 100ml de leche de almendras y 150ml de agua)
- 100g de maizena
- 1 huevo
¿Cómo se hace?
1. Mezclar la leche fría y la maizena y disolverla cuidadosamente para que no queden grumos (con las varillas mejor)
2. Cuando esté disuelta, añadir el huevo y batir un ratito más
3. En una sartén, poner un pellizco de mantequilla y cuando esté caliente, freír esta mezcla con ayuda de un cacito: distribuir el líquido por la sartén de manera a cubrir el fondo de ésta. No os paséis porque sino quedan unas crepes muy gruesas. Dejar que se vaya friendo a fuego medio: cuando esté hecho por debajo veréis que los bordes empiezan a despegarse de la sartén. Darle la vuelta con ayuda de una espátula y freírlos un ratito por el otro lado.
4. Retirar y reservar las crepes hasta la hora de servirlas.
Mirad como han quedado las mías:
Prometo que no me han costado más de media horita de trabajo (además del tiempo para hacer la nutella que en este caso yo ya la tenia hecha de antes). Un postre super bonito y apetecible para la familia o para las visitas. Si tenéis más personas pues doblad la receta y listo.
Salut!
Y he descubierto que, cuando se pone un poquito de voluntad, tampoco es tan dificil. Todo es aprender y acostumbrarse (por ejemplo a los tiempos de horneado, que no son iguales) y al final resulta bien. Es mucho más dificil cuando uno sale a comer fuera pero la verdad es que en casa no es complicado.
Ayer estaba haciendo la cena y pensaba, que ya que habia hecho nutella casera (muy fácil, la colgaré en otro post), que me iria además genial hacer unas crepes y servirlos con la nutellla y un poquito de nata gluten-free. Veréis lo tremendamente facil que es:
Ingredientes (me ha rendido 4 crepes):
- 250ml de leche (bien, tengo que decir que como también intento reducir la leche, pues puse 100ml de leche de almendras y 150ml de agua)
- 100g de maizena
- 1 huevo
¿Cómo se hace?
1. Mezclar la leche fría y la maizena y disolverla cuidadosamente para que no queden grumos (con las varillas mejor)
2. Cuando esté disuelta, añadir el huevo y batir un ratito más
3. En una sartén, poner un pellizco de mantequilla y cuando esté caliente, freír esta mezcla con ayuda de un cacito: distribuir el líquido por la sartén de manera a cubrir el fondo de ésta. No os paséis porque sino quedan unas crepes muy gruesas. Dejar que se vaya friendo a fuego medio: cuando esté hecho por debajo veréis que los bordes empiezan a despegarse de la sartén. Darle la vuelta con ayuda de una espátula y freírlos un ratito por el otro lado.
4. Retirar y reservar las crepes hasta la hora de servirlas.
Mirad como han quedado las mías:
Prometo que no me han costado más de media horita de trabajo (además del tiempo para hacer la nutella que en este caso yo ya la tenia hecha de antes). Un postre super bonito y apetecible para la familia o para las visitas. Si tenéis más personas pues doblad la receta y listo.
Salut!
diumenge, 4 d’agost del 2013
Mermelada light de fresones
Cuantísimo tiempo sin publicar! Pero chic@s es que no daba tiempo a todo!
Lo vamos a ir retomando, poquito a poco. He escogido esta receta para retomar las publicaciones en el blog, porque la idea, tan sencilla como estupenda, me encantó cuando la leí.
¿Os imagináis hacer una mermelada sin tener que pasar rato al fuego, sin nada de azúcar, con tan solo la fruta y con el maravilloso añadido de semillas de chia?
Pues aqui está. Como sabéis las semillas de chia son estupendas, muy sanas, contribuyen a la sensación de saciedad... un colofón fantástico para comer esta mermelada con pocas calorías y nada de culpa.
Ingredientes:
- ~ 300g de fresones
- 4 cucharadas soperas de semillas de chia
- 3 cucharadas soperas de agua
- 1/2 cucharada sopera de edulcorante (ej. stevia)
(y nada más!! bueno y una batidora o algo para deshacer los fresones y un bote para guardar vuestra mermelada)
¿Cómo se hace?
1. Hidratar las semillas de chia con el agua
2. Triturar los fresones con la batidora con el edulcorante. A mi me gusta no triturarlos demasiado, para dar la sensación esta de mermelada con trozos de fruta
3. Mezclar lo triturado con las semillas de chia hidratada, ponerlo en el bote y refrigerar.
Nada de calor, nada de pectina artificial, la chia se encargará de darle consistencia a vuestra mermelada. La receta original llevaba esos frutitos como frambuesas. A efectos, los fresones, moras, etc también servirian. Para otras frutas no sé que tal iría así que no puedo asegurar el resultado.
Mirad que estupendo aspecto (me disculparéis que el bote se ve con un poquito de 'vaho', porque lo había acabado de sacar de la nevera y fuera hacía calor!)
Lo vamos a ir retomando, poquito a poco. He escogido esta receta para retomar las publicaciones en el blog, porque la idea, tan sencilla como estupenda, me encantó cuando la leí.
¿Os imagináis hacer una mermelada sin tener que pasar rato al fuego, sin nada de azúcar, con tan solo la fruta y con el maravilloso añadido de semillas de chia?
Pues aqui está. Como sabéis las semillas de chia son estupendas, muy sanas, contribuyen a la sensación de saciedad... un colofón fantástico para comer esta mermelada con pocas calorías y nada de culpa.
Ingredientes:
- ~ 300g de fresones
- 4 cucharadas soperas de semillas de chia
- 3 cucharadas soperas de agua
- 1/2 cucharada sopera de edulcorante (ej. stevia)
(y nada más!! bueno y una batidora o algo para deshacer los fresones y un bote para guardar vuestra mermelada)
¿Cómo se hace?
1. Hidratar las semillas de chia con el agua
2. Triturar los fresones con la batidora con el edulcorante. A mi me gusta no triturarlos demasiado, para dar la sensación esta de mermelada con trozos de fruta
3. Mezclar lo triturado con las semillas de chia hidratada, ponerlo en el bote y refrigerar.
Nada de calor, nada de pectina artificial, la chia se encargará de darle consistencia a vuestra mermelada. La receta original llevaba esos frutitos como frambuesas. A efectos, los fresones, moras, etc también servirian. Para otras frutas no sé que tal iría así que no puedo asegurar el resultado.
Mirad que estupendo aspecto (me disculparéis que el bote se ve con un poquito de 'vaho', porque lo había acabado de sacar de la nevera y fuera hacía calor!)
dimarts, 11 de juny del 2013
Focaccia con ajo y tomillo
A nosotros nos gusta mucho ir a restaurantes italianos. Personalmente, es una cocina que me tiene encantada y muchas veces a uno que solemos ir, nos ponen el panecillo ese que se llama Focaccia.
Me encanta! Y siempre me he preguntado como se haría, pero inicialmente no daba con la receta, y cuando encontré alguna, la probé y no había salido muy bien. Ayer, por fin y por casualidad, di con la receta ideal. Tengo que decir que queda P E R F E C T O!! Vais a necesitar unas 2 horitas, eso sí, para hacerlo como toca, pero tampoco es mucho no? ya es más o menos lo que suele tardar un pan. La dejo aqui porque quedó muy, muy bien y es algo muy original para servir, sobre todo si estáis haciendo un "menú italiano"!!
Ingredientes:
- 1 taza de agua tebia
- 1 cucharada sopera de azúcar
- 1 paquete de levadura de panadería en polvo Maizena (no es la levadura química eh?)
- 1/2 cucharada de te de sal marina
- 2 + 1/3 tazas de harina (yo usé la de fuerza ayer)
- Spray antiadherente de cocina
- 1 y 1/2 cucharada sopera de aceite de oliva
- 3 dientes de ajo, picado muy fino
- 1 cucharada sopera de tomillo fresco picado
- sal marina para espolvorear
¿Cómo se hace?
1. Poner en un bol de buen tamaño el agua tebia y azúcar, y añadir la levadura, removiéndolo. Dejarlo aparte un par de minutos, para activarlo.
2. Añadir la media cucharada de sal y la harina, removiendo todo hasta integrarlo muy bien. Cubrir con film plástico y dejarlo en un sitio cálido para que doble de volumen (yo dejé unos 30-40 min).
3. Mientras tanto, en una sartén poner el aceite a calentar y cuando esté caliente, añadir el ajo cortado, removiendo por 30 segundos. Atención, si dejáis mucho tiempo o con fuego muy fuerte, se va a calcinar el ajo y esto no queremos. Por eso recomiendo el fuego fuerte pero no abrasador, y 30 segunditos luego friendo el ajo, después de eso, quitadlo del fuego. Una vez fuera del fuego, añadiréis el tomillo.
4. Preparar la bandeja del horno que habréis cubierto con papel vegetal, y además puesto el spray antiadherente (el que tengo es el mismo que para los pasteles, el Bake Easy y va muy bien). Poner también un poco del spray en las manos, y sacar la masa del bol. Estará bastante pegajosa y escurridiza así que hacedlo con cuidado. Estender la masa sobre la bandeja del horno formando un rectángulo de aproximadamente 20x40 cm.
5. Esparcir por encima el aceite con ajo y tomillo y, con los dedos, crear pequeñas depresiones en la masa (mirad la foto a ver si queda más claro). Asegurarse de que queda bien repartido, y espolvorear con un poco más de sal marina. Dejarlo crecer otra vez mientras calentáis el horno, que lo pondréis a unos 220ºC.
6. Cuando el horno esté ya a su temperatura, hornear la "Focaccia" por unos 15- 20 minutos, mirando cuando se empiece a dorar, es hora de quitarla y dejar enfriar.
Y ya está! mirad como quedó:
Es así mismo, quien lo conoce sabe que es un pan finito, que tiene este toque de ajo y sal, y por lo menos donde voy lo suelen servir como tiras largas, como si cortaran en el sentido del largo del pan por decir algo.
Si un dia queréis variar, ya lo sabéis, resulta muy aconsejable. Quien no sea muy fan de ajo, pues en lugar de tres puede poner 2, o si os sienta muy mal pues suprimirlo y hacerlo con aceite y sal marina. Todo será probar.
Salut!
Me encanta! Y siempre me he preguntado como se haría, pero inicialmente no daba con la receta, y cuando encontré alguna, la probé y no había salido muy bien. Ayer, por fin y por casualidad, di con la receta ideal. Tengo que decir que queda P E R F E C T O!! Vais a necesitar unas 2 horitas, eso sí, para hacerlo como toca, pero tampoco es mucho no? ya es más o menos lo que suele tardar un pan. La dejo aqui porque quedó muy, muy bien y es algo muy original para servir, sobre todo si estáis haciendo un "menú italiano"!!
Ingredientes:
- 1 taza de agua tebia
- 1 cucharada sopera de azúcar
- 1 paquete de levadura de panadería en polvo Maizena (no es la levadura química eh?)
- 1/2 cucharada de te de sal marina
- 2 + 1/3 tazas de harina (yo usé la de fuerza ayer)
- Spray antiadherente de cocina
- 1 y 1/2 cucharada sopera de aceite de oliva
- 3 dientes de ajo, picado muy fino
- 1 cucharada sopera de tomillo fresco picado
- sal marina para espolvorear
¿Cómo se hace?
1. Poner en un bol de buen tamaño el agua tebia y azúcar, y añadir la levadura, removiéndolo. Dejarlo aparte un par de minutos, para activarlo.
2. Añadir la media cucharada de sal y la harina, removiendo todo hasta integrarlo muy bien. Cubrir con film plástico y dejarlo en un sitio cálido para que doble de volumen (yo dejé unos 30-40 min).
3. Mientras tanto, en una sartén poner el aceite a calentar y cuando esté caliente, añadir el ajo cortado, removiendo por 30 segundos. Atención, si dejáis mucho tiempo o con fuego muy fuerte, se va a calcinar el ajo y esto no queremos. Por eso recomiendo el fuego fuerte pero no abrasador, y 30 segunditos luego friendo el ajo, después de eso, quitadlo del fuego. Una vez fuera del fuego, añadiréis el tomillo.
4. Preparar la bandeja del horno que habréis cubierto con papel vegetal, y además puesto el spray antiadherente (el que tengo es el mismo que para los pasteles, el Bake Easy y va muy bien). Poner también un poco del spray en las manos, y sacar la masa del bol. Estará bastante pegajosa y escurridiza así que hacedlo con cuidado. Estender la masa sobre la bandeja del horno formando un rectángulo de aproximadamente 20x40 cm.
5. Esparcir por encima el aceite con ajo y tomillo y, con los dedos, crear pequeñas depresiones en la masa (mirad la foto a ver si queda más claro). Asegurarse de que queda bien repartido, y espolvorear con un poco más de sal marina. Dejarlo crecer otra vez mientras calentáis el horno, que lo pondréis a unos 220ºC.
6. Cuando el horno esté ya a su temperatura, hornear la "Focaccia" por unos 15- 20 minutos, mirando cuando se empiece a dorar, es hora de quitarla y dejar enfriar.
Y ya está! mirad como quedó:
Es así mismo, quien lo conoce sabe que es un pan finito, que tiene este toque de ajo y sal, y por lo menos donde voy lo suelen servir como tiras largas, como si cortaran en el sentido del largo del pan por decir algo.
Si un dia queréis variar, ya lo sabéis, resulta muy aconsejable. Quien no sea muy fan de ajo, pues en lugar de tres puede poner 2, o si os sienta muy mal pues suprimirlo y hacerlo con aceite y sal marina. Todo será probar.
Salut!
Hamburguesas vegetarianas de avena
Soy una fan absoluta de las hamburguesas vegetarianas, pero reconozco que no todas las recetas quedan bien de textura. Ya las he hecho de lentejas, de garbanzos, de alubias, de quinoa, de todo lo que se me ocurrió y muchas veces tienen una textura friable y se rompen con facilidad. Que en el fondo no pasa nada, pero no es muy estético.
Con el tiempo y varias pruebas de intento y error, en general me parece que es mucho mejor (y desde luego más sano) ponerlas en el horno, en lugar de freír. Eso por una parte, aunque está claro que no asegura lo de la textura, es decir, que no se vayan a romper. Por otro, pasé a desconfiar un poco de recetas que quedan con ingredientes demasiado "sueltos", sin unir. Eso dificilmente va a "cuajar" por ningún sitio, así que mirad otro día he dado con éstas de avena, que la receta de entrada me gustó. Sobre la marcha la cambié un poco y sin falsa modestia creo que eso es lo que las ha hecho quedar con una buena textura.
No es dificil, así que la dejo aqui por si os apetece probar.
Ingredientes:
- 1 vaso de copos de avena
- 3/4 de vaso de agua
- 2 dientes de ajo
- 1/4 zanahoria grande, o 1/2 zanahoria pequeña
- 2 talos de apio
- 1/2 pimiento verde de los pequeños
- 1 chorrito de salsa de soja
- 1 cucharada de comino en polvo
- 2 cucharadas de perejil (si es fresco mejor)
- pimienta negra
- pan rallado
- 1 huevo
- sal marina
- harina blanca para rebozar
¿Cómo se hace?
1. Precalentar el horno a unos 200ºC y preparar la bandeja del horno con papel vegetal y un par de cucharadas de aceite, que lo distribuiréis a lo largo de la bandeja.
2. En un bol, ponemos el vaso de copos de avena y el ajo, zanahoria, apio y pimiento verde picados muy pequeñitos (yo los pasé por el robot, que en mi casa no son muy fans de encontrarse pedazos grandes de vegetales en las hamburguesas).
3. Añadir la cucharada de comino, la pimienta y el perejil. Luego, añadir el agua a temperatura ambiente y la salsa de soja (la cantidad ya es personal,a mi me encanta el gusto, pero si queréis suave pues yo me quedaría como máximo con una cucharada sopera). Mezclar todo bien con las manos. Añadir la sal después de la salsa de soja, para ajustar el gusto (caso contrario podría quedar demasiado fuerte).
4. Ahora, toca ajustar la consistencia de la masa. Aquí sería el momento de añadir el huevo (fue mi esencial modificación a la receta) y luego, pan rallado para que absorber el exceso de líquido. No obstante, atención, no debe quedar demasiado consistente la masa. Es normal que quede un poquito pegajosa, y eso asegurará que estarán crujientes por fuera y tiernas por dentro.
5. Cuando ya lo tengáis, coger cucharadas soperas generosas, darle forma de bolita con la mano y luego aplastarlas. Pasarlas por la harina, y ponerlas en el horno. Acabé dejando unos 10 minutos de cada lado pero como cada horno es un mundo, mejor ir mirando. Cuando un lado esté ya bien dorado, cuidadosamente girar para dorar el otro.
Y ya la tenéis! Quedaron tan buenas, creo que no volveré a freír jamás una hamburguesa vegetal, solo en el horno.
Lo siento pero de esa se me olvidó hacer foto y mirad que estaban buenas (quizás precisamente por eso volaron rápido). Pero no, francamente no tienen ningún misterio.
Salut! espero que os gusten.
Con el tiempo y varias pruebas de intento y error, en general me parece que es mucho mejor (y desde luego más sano) ponerlas en el horno, en lugar de freír. Eso por una parte, aunque está claro que no asegura lo de la textura, es decir, que no se vayan a romper. Por otro, pasé a desconfiar un poco de recetas que quedan con ingredientes demasiado "sueltos", sin unir. Eso dificilmente va a "cuajar" por ningún sitio, así que mirad otro día he dado con éstas de avena, que la receta de entrada me gustó. Sobre la marcha la cambié un poco y sin falsa modestia creo que eso es lo que las ha hecho quedar con una buena textura.
No es dificil, así que la dejo aqui por si os apetece probar.
Ingredientes:
- 1 vaso de copos de avena
- 3/4 de vaso de agua
- 2 dientes de ajo
- 1/4 zanahoria grande, o 1/2 zanahoria pequeña
- 2 talos de apio
- 1/2 pimiento verde de los pequeños
- 1 chorrito de salsa de soja
- 1 cucharada de comino en polvo
- 2 cucharadas de perejil (si es fresco mejor)
- pimienta negra
- pan rallado
- 1 huevo
- sal marina
- harina blanca para rebozar
¿Cómo se hace?
1. Precalentar el horno a unos 200ºC y preparar la bandeja del horno con papel vegetal y un par de cucharadas de aceite, que lo distribuiréis a lo largo de la bandeja.
2. En un bol, ponemos el vaso de copos de avena y el ajo, zanahoria, apio y pimiento verde picados muy pequeñitos (yo los pasé por el robot, que en mi casa no son muy fans de encontrarse pedazos grandes de vegetales en las hamburguesas).
3. Añadir la cucharada de comino, la pimienta y el perejil. Luego, añadir el agua a temperatura ambiente y la salsa de soja (la cantidad ya es personal,a mi me encanta el gusto, pero si queréis suave pues yo me quedaría como máximo con una cucharada sopera). Mezclar todo bien con las manos. Añadir la sal después de la salsa de soja, para ajustar el gusto (caso contrario podría quedar demasiado fuerte).
4. Ahora, toca ajustar la consistencia de la masa. Aquí sería el momento de añadir el huevo (fue mi esencial modificación a la receta) y luego, pan rallado para que absorber el exceso de líquido. No obstante, atención, no debe quedar demasiado consistente la masa. Es normal que quede un poquito pegajosa, y eso asegurará que estarán crujientes por fuera y tiernas por dentro.
5. Cuando ya lo tengáis, coger cucharadas soperas generosas, darle forma de bolita con la mano y luego aplastarlas. Pasarlas por la harina, y ponerlas en el horno. Acabé dejando unos 10 minutos de cada lado pero como cada horno es un mundo, mejor ir mirando. Cuando un lado esté ya bien dorado, cuidadosamente girar para dorar el otro.
Y ya la tenéis! Quedaron tan buenas, creo que no volveré a freír jamás una hamburguesa vegetal, solo en el horno.
Lo siento pero de esa se me olvidó hacer foto y mirad que estaban buenas (quizás precisamente por eso volaron rápido). Pero no, francamente no tienen ningún misterio.
Salut! espero que os gusten.
dilluns, 10 de juny del 2013
Yaki Onigiri
Bueno hay que decir que no soy, no somos, muy fans de la cocina oriental, sobretodo de la parte que se come cruda. Tengo serias restricciones sobre "comer crudo" en lo que se refiere a pescado, pero bueno reconozco todo el arte, la tradición y que a muchísima gente sí que le gusta.
De hecho, si quitamos el tema del crudo, hasta hay cosas que sí me gustan bastante!! Y siempre he querido experimentar un poco, meter las patitas ahí a ver que tal me salía. Otro día vi la receta de esto, que se llama Yaki Onigiri y según he leído, es como una especie de "snack" bastante conocido y utilizado en Japón. Me parecía asumible y factible, así que lo intenté el fin de semana, y mirad: nos gustó mucho!
Lo único que necesitáis es arroz (yo no tenía arroz de sushi ni intención de comprarlo así que hice con arroz redondo, que también en algunas recetas lo daban por bueno) y salsa de soja. Y una sartén. Vais a hacer unos acompañamientos muy fáciles y deliciosos, para salir de la monotonía de lo de siempre. Yo hice para acompañar un atún (uno a la plancha, de los de verdad).
Ingredientes:
- Arroz redondo (yo puse tres tazas pero me pasé muchísimo con la cantidad, fue una exageración absurda, con una taza, o una taza + media, tenéis más que de sobras para dos o tres personas, incluso 4 quizás)
- Salsa de soja para pincelar
¿Cómo se hace?
1. Proceso de extracción de almidón del arroz: es laborioso y va a tardar un poco, pero paciencia que sino se ve que no sale bien. Vais a coger el arroz en un bol y lavarlo bajo el agua, pero no solo ponerlo bajo el grifo: hay que frotar el arroz entre las manos. Veréis que las primeras veces el agua sale blanca. Cambiad el agua y seguid haciéndolo hasta que el agua salga prácticamente transparente. A mi me costó como unos 10 cambios de agua, aunque en el enlace hablaban de 8 cambios.
2. Una vez habéis conseguido esto, dejar el arroz en remojo durante media hora. La proporción sería aproximadamente una taza y media de agua por cada taza utilizada de arroz.
3. Luego toca cocerlo. En el enlace sugerían una olla especial para hacer sushi pero yo esto no tengo. Tengo una olla eléctrica con un programa de sushi pero me parecía demasiada innovación y que no iba a poder controlar el proceso. Así que decidí optar por la olla normal. Hay que poner los primeros minutos destapada y a fuego alto, y cuando empiece a hervir, bajar el fuego a bien suave y tapar. No la abriréis en los siguientes 20 minutos.
4. Dar forma a los Yaki Onigiri. En teoría se hace con el arroz caliente pero es de escaldar las manos, así que recomiendo dejar templar un poquito antes de manipularlo. Dicen que hay unos moldecitos especiales para hacerlos cuadrados pero eso yo tampoco tenía. La alternativa era hacer una bolita bien compacta con el arroz y luego aplanar los lados, que fue lo que hice. IMPORTANTE: tenéis que mojar las manos y toda la superficie que vaya a tocar el arroz, porque es como un pegamento... se va a pegar en todo. El lado bueno es que queda muy compacto a la hora de freír también.
5. Freír los Yaki Onigiri en una sartén caliente antiadherente, con un pelín de aceite, no mucho. Nada de bañarlos en aceite! Se dora de cada lado un ratito y cuando tengáis todos los lados dorados, les pinceláis con salsa de soja (usad un pincel de estos de reposteria, como de silicona, para no soltar pelitos).
Tengo que decir que para mi gusto faltaba sal, que no vi por ninguna parte en la receta. Quizás es desconocimiento e incultura de mi parte y este es el gusto que tienen que tener, no lo sé. Pero yo tiré un poquito de sal en los míos. Los que me han quedado mejor fueron los que se hicieron a temperatura relativamente más alta, que les dieron un sellado y un toque medio crujiente por fuera. Realmente buenisimo, y no muy laborioso. Mirad como me han quedado (he hecho alguno en forma de pirámide también, que decían que eran típicos cubitos y pirámides)
Pues os invito a probarlos, que a mi me parecieron geniales!
Salut ;)
De hecho, si quitamos el tema del crudo, hasta hay cosas que sí me gustan bastante!! Y siempre he querido experimentar un poco, meter las patitas ahí a ver que tal me salía. Otro día vi la receta de esto, que se llama Yaki Onigiri y según he leído, es como una especie de "snack" bastante conocido y utilizado en Japón. Me parecía asumible y factible, así que lo intenté el fin de semana, y mirad: nos gustó mucho!
Lo único que necesitáis es arroz (yo no tenía arroz de sushi ni intención de comprarlo así que hice con arroz redondo, que también en algunas recetas lo daban por bueno) y salsa de soja. Y una sartén. Vais a hacer unos acompañamientos muy fáciles y deliciosos, para salir de la monotonía de lo de siempre. Yo hice para acompañar un atún (uno a la plancha, de los de verdad).
Ingredientes:
- Arroz redondo (yo puse tres tazas pero me pasé muchísimo con la cantidad, fue una exageración absurda, con una taza, o una taza + media, tenéis más que de sobras para dos o tres personas, incluso 4 quizás)
- Salsa de soja para pincelar
¿Cómo se hace?
1. Proceso de extracción de almidón del arroz: es laborioso y va a tardar un poco, pero paciencia que sino se ve que no sale bien. Vais a coger el arroz en un bol y lavarlo bajo el agua, pero no solo ponerlo bajo el grifo: hay que frotar el arroz entre las manos. Veréis que las primeras veces el agua sale blanca. Cambiad el agua y seguid haciéndolo hasta que el agua salga prácticamente transparente. A mi me costó como unos 10 cambios de agua, aunque en el enlace hablaban de 8 cambios.
2. Una vez habéis conseguido esto, dejar el arroz en remojo durante media hora. La proporción sería aproximadamente una taza y media de agua por cada taza utilizada de arroz.
3. Luego toca cocerlo. En el enlace sugerían una olla especial para hacer sushi pero yo esto no tengo. Tengo una olla eléctrica con un programa de sushi pero me parecía demasiada innovación y que no iba a poder controlar el proceso. Así que decidí optar por la olla normal. Hay que poner los primeros minutos destapada y a fuego alto, y cuando empiece a hervir, bajar el fuego a bien suave y tapar. No la abriréis en los siguientes 20 minutos.
4. Dar forma a los Yaki Onigiri. En teoría se hace con el arroz caliente pero es de escaldar las manos, así que recomiendo dejar templar un poquito antes de manipularlo. Dicen que hay unos moldecitos especiales para hacerlos cuadrados pero eso yo tampoco tenía. La alternativa era hacer una bolita bien compacta con el arroz y luego aplanar los lados, que fue lo que hice. IMPORTANTE: tenéis que mojar las manos y toda la superficie que vaya a tocar el arroz, porque es como un pegamento... se va a pegar en todo. El lado bueno es que queda muy compacto a la hora de freír también.
5. Freír los Yaki Onigiri en una sartén caliente antiadherente, con un pelín de aceite, no mucho. Nada de bañarlos en aceite! Se dora de cada lado un ratito y cuando tengáis todos los lados dorados, les pinceláis con salsa de soja (usad un pincel de estos de reposteria, como de silicona, para no soltar pelitos).
Tengo que decir que para mi gusto faltaba sal, que no vi por ninguna parte en la receta. Quizás es desconocimiento e incultura de mi parte y este es el gusto que tienen que tener, no lo sé. Pero yo tiré un poquito de sal en los míos. Los que me han quedado mejor fueron los que se hicieron a temperatura relativamente más alta, que les dieron un sellado y un toque medio crujiente por fuera. Realmente buenisimo, y no muy laborioso. Mirad como me han quedado (he hecho alguno en forma de pirámide también, que decían que eran típicos cubitos y pirámides)
Pues os invito a probarlos, que a mi me parecieron geniales!
Salut ;)
dijous, 6 de juny del 2013
Pan de Sartén
Hace mucho que vi la idea de esta receta en un blog que considero admirable por la gran calidad y cuidado de sus recetas, que es el blog de Kristin Ehrenborg (que podéis visitar pinchando en ESTE ENLACE). Hay maravillas en panes, galletas, hay muchas recetas para quien tiene alguna restricción alimentaria... un lujo.
Un día vi ésta y ahí quedó la idea, pensaba "ya lo haré" y nunca lo hice. Ayer entonces encontré el momento.
"Pan" es, bueno, un decir, no es el "pan" como habéis imaginado, redondito, o en plan baguette. Es un "pan" que queda finito y "planchado", me recordaba algún pan árabe que había visto, en su forma, pero no de gusto. A mi, para variar un poco, me gustó aunque ciertamente es algo que no haría para el desayuno, por ejemplo. Hice en la cena como una especie de acompañamiento.
Pues vamos allá, mirad lo que váis a necesitar:
Ingredientes: (ahh como siempre yo hice la mitad, primero porque no sabía como iba a salir y segundo porque somos pocos, pero la receta original era el doble de la que pongo)
- 90g de harina de espelta
- 30g de harina de centeno (ainnsss yo esta ayer no tenía así que usé de trigo sarraceno, lo que le dio otro tacto al pan)
- 125ml de yogur natural sin azúcar
- 1/3 cucharadita de levadura química en polvo
- 1/2 cucharadita de bicarbonato
- 1/2 cucharadita de sal de mar
(opcionales serian 1/2 cucharada de miel, 1/2 cucharadita de anís machacado, yo usé un poquito de salva y romero de mis plantitas aromáticas, finamente picados)
¿Cómo se hace?
1. Reunir todos los ingredientes secos en un bol
2. Añadir el yogur y trabajar la masa hasta que esté elástica. Es posible que haya que añadir un poco más de harina para que la masa no se pegue
3. Cortarla en 3 trozos (si hacéis el doble de la receta, pues 6) y aplanar con la mano hasta que tengan unos 12cm de diámetro aproximadamente
4. Calentar la sartén (yo no puse nada de aceite) y cocinar cada pan sobre fuego mediano, unos minutos de cada lado. Yo lo hice hasta que empezó a dorarse por las bordas.
Finalmente, aunque la receta no ponía, al final le eché un pelín de aceite picante hecho por mi, y un poquito de queso mozzarella rallado para que se fundiera. Pensaba que le daría más vida como acompañamiento.
Así resultó (aún le faltaba el queso en esa foto):
Sí soy consciente de que parece una hamburguesa pero juro que no.
A mi me gustó y a mi familia también así que os dejo la receta aquí por si un día queréis probar algo distinto.
Ahh sí MUY IMPORTANTE, servidlas calentitas!! no las hagáis con antelación, están buenas recién hechas....
Salut!
Un día vi ésta y ahí quedó la idea, pensaba "ya lo haré" y nunca lo hice. Ayer entonces encontré el momento.
"Pan" es, bueno, un decir, no es el "pan" como habéis imaginado, redondito, o en plan baguette. Es un "pan" que queda finito y "planchado", me recordaba algún pan árabe que había visto, en su forma, pero no de gusto. A mi, para variar un poco, me gustó aunque ciertamente es algo que no haría para el desayuno, por ejemplo. Hice en la cena como una especie de acompañamiento.
Pues vamos allá, mirad lo que váis a necesitar:
Ingredientes: (ahh como siempre yo hice la mitad, primero porque no sabía como iba a salir y segundo porque somos pocos, pero la receta original era el doble de la que pongo)
- 90g de harina de espelta
- 30g de harina de centeno (ainnsss yo esta ayer no tenía así que usé de trigo sarraceno, lo que le dio otro tacto al pan)
- 125ml de yogur natural sin azúcar
- 1/3 cucharadita de levadura química en polvo
- 1/2 cucharadita de bicarbonato
- 1/2 cucharadita de sal de mar
(opcionales serian 1/2 cucharada de miel, 1/2 cucharadita de anís machacado, yo usé un poquito de salva y romero de mis plantitas aromáticas, finamente picados)
¿Cómo se hace?
1. Reunir todos los ingredientes secos en un bol
2. Añadir el yogur y trabajar la masa hasta que esté elástica. Es posible que haya que añadir un poco más de harina para que la masa no se pegue
3. Cortarla en 3 trozos (si hacéis el doble de la receta, pues 6) y aplanar con la mano hasta que tengan unos 12cm de diámetro aproximadamente
4. Calentar la sartén (yo no puse nada de aceite) y cocinar cada pan sobre fuego mediano, unos minutos de cada lado. Yo lo hice hasta que empezó a dorarse por las bordas.
Finalmente, aunque la receta no ponía, al final le eché un pelín de aceite picante hecho por mi, y un poquito de queso mozzarella rallado para que se fundiera. Pensaba que le daría más vida como acompañamiento.
Así resultó (aún le faltaba el queso en esa foto):
Sí soy consciente de que parece una hamburguesa pero juro que no.
A mi me gustó y a mi familia también así que os dejo la receta aquí por si un día queréis probar algo distinto.
Ahh sí MUY IMPORTANTE, servidlas calentitas!! no las hagáis con antelación, están buenas recién hechas....
Salut!
dimecres, 5 de juny del 2013
Mini-bocados de menta y chocolate, (feat. Lorraine Pascale)
Lorraine Pascale es una cocinera que me encanta, porque me identifico mucho con ella. Le gustan las cosas de diseño, las mezclas, pero también que tengan mucho sabor, mucha sazón y mucha especie.
Siempre que puedo asisto sus programas, y ese día precisamente Lorraine presentaba un programa en Barcelona, mi ciudad del corazón. Hablaba de las chocolaterías e hizo dos cosas riquísimas aunque me fijé en esa y de la segunda francamente ni me acuerdo.
Me quedé prendadísima de los peppermint chocolate creams, y pensaba, eso lo tengo que hacer yo pero a la de ya. Me pareció fácil y me rondaba la idea de introducir una punta de cucharadita de colorante alimentario verde, para darle más realismo a lo de la menta, cuando vi que el extracto de menta era transparente.
Bien pues os cuento como se hicieron. De hecho se hicieron hace muchos días, pero como se los regalé enviando por correo a un gran amigo que tengo en Madrid, hasta que éste viera su regalo, no lo quería "descubrir" aquí en el blog para no quitarle la sorpresa. Por cierto según él están muy buenos así que os lo aconsejo, sobre todo si os gusta la mezcla chocolate + menta.
Ingredientes (yo hice media receta para ver que tal me salían, la receta original es el doble):
- 160g de azúcar glas
- 65g de leche condensada
- 1 cucharada sopera de extracto de menta (yo puse 1 y 1/2 porque quería realmente acentuarlo, si no os gusta muy fuerte pues una cucharada de te)
- 1 punta de cucharadita de colorante alimentario verde (que obtuve mezclando amarillo y azul). Cuidado!! esos colorantes son muy muy potentes, así que mejor ir poco a poco, una micro-punta de cucharadita y si queda un poco clarito, echar una gota más.
- 100g de chocolate con alto teor de cacau (70% mínimo)
¿Cómo se hace?
1. Mezclar el azúcar glas, la leche condensada y el extracto de menta en un bol, trabajándolos hasta que se forme una masa manejable. Yo puse el colorante después de la masa formada, para darle un aire de "mármol" pero si no lo queréis así, mejor poner antes al principio.
2. Espolvorear una superficie con azúcar glas y poner la masa encima de esta. Aplanar con un rodillo hasta que tenga entre 3 y 5 mm (yo hice de 3, bien finita pero 5 también estará bien)
3. Cortarlo en bocados redonditos pequeños (por ejemplo, usando un vaso de chupito invertido como molde que fue lo que hice: si tenéis moldes de galletas pequeñines servirán). Colocarlos en un plato o bandeja cubierto con papel de horno y llevar a la nevera por, mínimo, 1h. Vigilar que no se toquen unos a otros.
4. Pasado este tiempo, fundir los 100g de chocolate y esperar a que esté tibio (no pasarse, sino empieza a solidificar muy rápido). Podéis fundir el chocolate al baño maría o bien ponerlo en el microondas, vigilando de hacer pequeños tiempos de 20 o 30 segundos para evitar quemar el chocolate.
5. Coger los bocaditos de la nevera y hundir la mitad de cada uno en el chocolate, dejándolos secar encima de papel vegetal. Yo además les decoré usando una "tosca" manera, poniendo un poco de chocolate en una cuchara y pasándola muy rápido por encima de los bocaditos, haciendo el "efecto centrífuga", lo que les dejó con rayitas de chocolate muy originales.
6. Devolverlos a la nevera, donde yo aconsejo que estén, no porque se estropeen fácilmente sino porque tanto el chocolate como la parte de menta están más manejables cuando están fríos.
Como véis, no necesita horneado ni nada muy complicado. Así han quedado los míos. Siento la foto un poco guarrina pero los había acabado de decorar y aún faltaba quitarlos de la bandeja, limpiar los excesos de chocolate y envolverlos.
Luego los envolví uno a uno en papel vegetal con etiqueta de estrellitas (sí, sí una pijada pero creía que se iban a proteger mejor si no se tocaban unos a otros) y acondicioné en una cajita.
Os invito a probarlos y que luego me contéis que tal!
Siempre que puedo asisto sus programas, y ese día precisamente Lorraine presentaba un programa en Barcelona, mi ciudad del corazón. Hablaba de las chocolaterías e hizo dos cosas riquísimas aunque me fijé en esa y de la segunda francamente ni me acuerdo.
Me quedé prendadísima de los peppermint chocolate creams, y pensaba, eso lo tengo que hacer yo pero a la de ya. Me pareció fácil y me rondaba la idea de introducir una punta de cucharadita de colorante alimentario verde, para darle más realismo a lo de la menta, cuando vi que el extracto de menta era transparente.
Bien pues os cuento como se hicieron. De hecho se hicieron hace muchos días, pero como se los regalé enviando por correo a un gran amigo que tengo en Madrid, hasta que éste viera su regalo, no lo quería "descubrir" aquí en el blog para no quitarle la sorpresa. Por cierto según él están muy buenos así que os lo aconsejo, sobre todo si os gusta la mezcla chocolate + menta.
Ingredientes (yo hice media receta para ver que tal me salían, la receta original es el doble):
- 160g de azúcar glas
- 65g de leche condensada
- 1 cucharada sopera de extracto de menta (yo puse 1 y 1/2 porque quería realmente acentuarlo, si no os gusta muy fuerte pues una cucharada de te)
- 1 punta de cucharadita de colorante alimentario verde (que obtuve mezclando amarillo y azul). Cuidado!! esos colorantes son muy muy potentes, así que mejor ir poco a poco, una micro-punta de cucharadita y si queda un poco clarito, echar una gota más.
- 100g de chocolate con alto teor de cacau (70% mínimo)
¿Cómo se hace?
1. Mezclar el azúcar glas, la leche condensada y el extracto de menta en un bol, trabajándolos hasta que se forme una masa manejable. Yo puse el colorante después de la masa formada, para darle un aire de "mármol" pero si no lo queréis así, mejor poner antes al principio.
2. Espolvorear una superficie con azúcar glas y poner la masa encima de esta. Aplanar con un rodillo hasta que tenga entre 3 y 5 mm (yo hice de 3, bien finita pero 5 también estará bien)
3. Cortarlo en bocados redonditos pequeños (por ejemplo, usando un vaso de chupito invertido como molde que fue lo que hice: si tenéis moldes de galletas pequeñines servirán). Colocarlos en un plato o bandeja cubierto con papel de horno y llevar a la nevera por, mínimo, 1h. Vigilar que no se toquen unos a otros.
4. Pasado este tiempo, fundir los 100g de chocolate y esperar a que esté tibio (no pasarse, sino empieza a solidificar muy rápido). Podéis fundir el chocolate al baño maría o bien ponerlo en el microondas, vigilando de hacer pequeños tiempos de 20 o 30 segundos para evitar quemar el chocolate.
5. Coger los bocaditos de la nevera y hundir la mitad de cada uno en el chocolate, dejándolos secar encima de papel vegetal. Yo además les decoré usando una "tosca" manera, poniendo un poco de chocolate en una cuchara y pasándola muy rápido por encima de los bocaditos, haciendo el "efecto centrífuga", lo que les dejó con rayitas de chocolate muy originales.
6. Devolverlos a la nevera, donde yo aconsejo que estén, no porque se estropeen fácilmente sino porque tanto el chocolate como la parte de menta están más manejables cuando están fríos.
Como véis, no necesita horneado ni nada muy complicado. Así han quedado los míos. Siento la foto un poco guarrina pero los había acabado de decorar y aún faltaba quitarlos de la bandeja, limpiar los excesos de chocolate y envolverlos.
Luego los envolví uno a uno en papel vegetal con etiqueta de estrellitas (sí, sí una pijada pero creía que se iban a proteger mejor si no se tocaban unos a otros) y acondicioné en una cajita.
Os invito a probarlos y que luego me contéis que tal!
dimarts, 14 de maig del 2013
Mini hamburguesas de atún
Pues ayer estaba dando vueltas a lo que hacer, y vi esta idea pero ni me acuerdo donde.
Fue más bien una inspiración porque entre que la receta no explicaba muy bien la cantidad de atún y que algunas cosas no las tenia o no quería poner... y ya por último, fui acrecentando cosas para darle el punto necesario de no deshacerse... realmente cambió bastante desde lo que leí hasta lo que realmente hice.
Seguro que ya habéis visto hamburguesas de pescado o de atún por ahi, sí claro que las hay para vender. Pero a mi me gusta hacerlas y probar combinaciones nuevas. Recientemene, colgué una hamburguesa de pescado y quinoa, también muy buena y más suave que ésta de hoy. Bien, esa de hoy me gustó porque queda con un gusto ligeramente picante, por lo que lleva. Creo que es importante que lo que hacemos, a veces, se salga un poco de lo habitual para sorprender, sino caímos siempre en lo mismo, y aburre. La receta original llevaba chili, esos pimientos tan picantes. Yo eso no tenía y personalmente creo que hubiera cargado un poco demasiado la receta, pero bueno todo es cuestión de probar.
Os cuento como las hice.
Ingredientes (para unas 8 mini hamburguesas):
- 3 latas de atún (de esas latas pequeñitas que venden en el super en packs de 3 o de 6, creo que son de unos 80 u 85g cada una), o una cantidad similar si tenéis otro envase. Escurrid bien el aceite que llevan dentro, queremos solo el atún sólido, que luego desmenuzaremos. Si deseáis, podéis reservar este aceite para darle sabor a alguna otra cosa.
- 1 cebolla de las suaves (las tiernas sirven)
- 2 dientes de ajo
- pimiento rojo (si es pequeño, podéis usar 1/2, y si es grande, con 1/3 vale), recordad quitarle las pepitas y la parte blanca de dentro
- 1 huevo batido
- aproximadamente 1cm de raíz de jengibre rallada
- 1 cucharada sopera de cilantro picado (yo reconozco que me he pasado tres pueblos con el cilantro: me gusta como sabe, pero yo puse más que eso que os digo, y la verdad es que 'cantaba' bastante; con la cucharada sopera ya vale)
- aproximadamente media taza de harina tipo "Panko", que es como el pan rallado pero no tan fina. Como alternativa podéis triturar en el procesador algunas tostadas, o pan que os ha quedado seco (no lo tiréis!! hay infinidad de cosas que se pueden hacer y esa es una). Sin embargo, no lo trituréis muy fino, la gracia precisamente es que NO sea como el pan rallado del super, sino más granulado.
- 1 cucharada sopera de salsa de soja (bueno la receta ponia salsa de pescado, pero esto yo no tenía a mano; si tenéis de pescado, mucho mejor, aunque quedó muy bueno con esta que digo)
- Sal y pimienta recién molida a gusto, y algo de harina blanca para rebozar antes de freír
¿Cómo se hace?
1. Picar muy finos (yo usé el procesador, o robot) la cebolla, el ajo, el pimiento y el cilantro
2. En un bol, depositar el atún sólido proveniente de las latas de atún, y añadirle lo que habéis triturado en el punto 1.
3. Rallar sobre la mezcla la raiz de jengibre, y añadir el huevo batido y la harina tipo "Panko". Aquí podéis modular y tirar un poco más de Panko si veis que está demasiado líquido (pero no va a estar). Aprovechad para rectificar de sal y pimienta, recordando que ya hay elementos con gusto contundente, así que id con cuidado.
4. Poner abundante aceite a calentar en una sartén.
5. Formar las mini hamburguesas (yo sugiero hacer pequeñas porque, por mi experiencia, si son más grandes pueden romperse al girarlas para freír al otro lado... o romperse cuando las vais a trasladar al plato y servir... y es una pena). De tamaño sería pues lo que podáis coger con una cucharada sopera generosa. Os va a caber en la palma de la mano de sobras, y con las mismas manos, las aplanáis ligeramente para darle forma de mini hamburguesa. Pasadlas por la harina y freír más o menos 1-2 min de cada lado. Será relativamente fácil darles la vuelta siendo pequeñitas.
6. Escurrir sobre un papel de cocina y servir.
La receta decía de acompañarlas con una salsa agridulce de cilantro pero eso ya para ese momento me parecía demasiado. Si alguien se interesa por la receta de la salsa la puedo mirar en mis apuntes que ahi estará pero no hice.
Y han quedado así:
Yo lo acompañé de unas verduritas al horno, pero bueno podéis hacer un arroz blanco, o algunas patatas, o una ensalada... las posibilidades están abiertas. Simplemente recordar que su gusto se sale de lo habitual por lo fresco/picante que le aportan el jengibre, cilantro... así que yo optaría por un acompañamiento no muy contundente, más bien neutro, para dejar la hamburguesa en destaque. Y calcularía unas 3 hamburguesas por comensal, más o menos.
Espero que os guste!
Salut.
Fue más bien una inspiración porque entre que la receta no explicaba muy bien la cantidad de atún y que algunas cosas no las tenia o no quería poner... y ya por último, fui acrecentando cosas para darle el punto necesario de no deshacerse... realmente cambió bastante desde lo que leí hasta lo que realmente hice.
Seguro que ya habéis visto hamburguesas de pescado o de atún por ahi, sí claro que las hay para vender. Pero a mi me gusta hacerlas y probar combinaciones nuevas. Recientemene, colgué una hamburguesa de pescado y quinoa, también muy buena y más suave que ésta de hoy. Bien, esa de hoy me gustó porque queda con un gusto ligeramente picante, por lo que lleva. Creo que es importante que lo que hacemos, a veces, se salga un poco de lo habitual para sorprender, sino caímos siempre en lo mismo, y aburre. La receta original llevaba chili, esos pimientos tan picantes. Yo eso no tenía y personalmente creo que hubiera cargado un poco demasiado la receta, pero bueno todo es cuestión de probar.
Os cuento como las hice.
Ingredientes (para unas 8 mini hamburguesas):
- 3 latas de atún (de esas latas pequeñitas que venden en el super en packs de 3 o de 6, creo que son de unos 80 u 85g cada una), o una cantidad similar si tenéis otro envase. Escurrid bien el aceite que llevan dentro, queremos solo el atún sólido, que luego desmenuzaremos. Si deseáis, podéis reservar este aceite para darle sabor a alguna otra cosa.
- 1 cebolla de las suaves (las tiernas sirven)
- 2 dientes de ajo
- pimiento rojo (si es pequeño, podéis usar 1/2, y si es grande, con 1/3 vale), recordad quitarle las pepitas y la parte blanca de dentro
- 1 huevo batido
- aproximadamente 1cm de raíz de jengibre rallada
- 1 cucharada sopera de cilantro picado (yo reconozco que me he pasado tres pueblos con el cilantro: me gusta como sabe, pero yo puse más que eso que os digo, y la verdad es que 'cantaba' bastante; con la cucharada sopera ya vale)
- aproximadamente media taza de harina tipo "Panko", que es como el pan rallado pero no tan fina. Como alternativa podéis triturar en el procesador algunas tostadas, o pan que os ha quedado seco (no lo tiréis!! hay infinidad de cosas que se pueden hacer y esa es una). Sin embargo, no lo trituréis muy fino, la gracia precisamente es que NO sea como el pan rallado del super, sino más granulado.
- 1 cucharada sopera de salsa de soja (bueno la receta ponia salsa de pescado, pero esto yo no tenía a mano; si tenéis de pescado, mucho mejor, aunque quedó muy bueno con esta que digo)
- Sal y pimienta recién molida a gusto, y algo de harina blanca para rebozar antes de freír
¿Cómo se hace?
1. Picar muy finos (yo usé el procesador, o robot) la cebolla, el ajo, el pimiento y el cilantro
2. En un bol, depositar el atún sólido proveniente de las latas de atún, y añadirle lo que habéis triturado en el punto 1.
3. Rallar sobre la mezcla la raiz de jengibre, y añadir el huevo batido y la harina tipo "Panko". Aquí podéis modular y tirar un poco más de Panko si veis que está demasiado líquido (pero no va a estar). Aprovechad para rectificar de sal y pimienta, recordando que ya hay elementos con gusto contundente, así que id con cuidado.
4. Poner abundante aceite a calentar en una sartén.
5. Formar las mini hamburguesas (yo sugiero hacer pequeñas porque, por mi experiencia, si son más grandes pueden romperse al girarlas para freír al otro lado... o romperse cuando las vais a trasladar al plato y servir... y es una pena). De tamaño sería pues lo que podáis coger con una cucharada sopera generosa. Os va a caber en la palma de la mano de sobras, y con las mismas manos, las aplanáis ligeramente para darle forma de mini hamburguesa. Pasadlas por la harina y freír más o menos 1-2 min de cada lado. Será relativamente fácil darles la vuelta siendo pequeñitas.
6. Escurrir sobre un papel de cocina y servir.
La receta decía de acompañarlas con una salsa agridulce de cilantro pero eso ya para ese momento me parecía demasiado. Si alguien se interesa por la receta de la salsa la puedo mirar en mis apuntes que ahi estará pero no hice.
Y han quedado así:
Yo lo acompañé de unas verduritas al horno, pero bueno podéis hacer un arroz blanco, o algunas patatas, o una ensalada... las posibilidades están abiertas. Simplemente recordar que su gusto se sale de lo habitual por lo fresco/picante que le aportan el jengibre, cilantro... así que yo optaría por un acompañamiento no muy contundente, más bien neutro, para dejar la hamburguesa en destaque. Y calcularía unas 3 hamburguesas por comensal, más o menos.
Espero que os guste!
Salut.
diumenge, 12 de maig del 2013
Sajtos Pogácsa ("puff" húngaro de queso)
Pues os preguntaréis de donde saco esas ideas un poco estratosféricas, a ver a quien se le ocurre ir a por unos puffs que encima dan un pelín de trabajo...
Bueno, yo surfeo mucho por páginas de cocina, muchas son inglesas y americanas, pero traen recetas de todas las etnias. Me suelen llamar la atención recetas más bien de reposteria o que trabajen masas (mi pasión absoluta), y/o que llevan queso o mezclas exóticas aunque esto último en mi casa se lo miran con lupa.
Bien pues vi esto y la verdad el aspecto y la idea eran estupendos. La primera vez leí mal y no entendí que había 4 descansos de media hora, y pensé... viernes por la noche lo hago. Cuando, receta en mano, la leí entera, entonces lo descarté para viernes noche y la hice la tarde de sábado. Veréis que claro, con los descansos que tiene entremedio, muy rápida no es que sea, pero os aseguro de verdad de la buena que vale la pena.
Bien, eso es lo que vais a necesitar, aparte de tiempo. Yo hice un tercio de las cantidades de la receta y me ha dado unos 15-20 puffs. Para probar y para dos, más que suficiente. Os dejo las medidas de lo que hice yo pero vamos, si sois más haced más porque son irresistibles.
Ingredientes:
- 170g de harina
- 1/2 paquete de levadura de pan seca tipo Maizena
- 1/3 de cucharada de te de azucar (en mi caso pues puse una cucharada de edulcorante)
- 30 ml de agua tebia
- 70 g de mantequilla sin sal
- 1/2 cucharada sopera de sal
- 1 huevo separado en yema y clara
- 2 cucharadas soperas de yogur griego
- aprox. 70g de queso rallado (yo usé emmental que era el que tenia, pero si teneis cheddar, estupendo)
¿Cómo se hace?
1. Mezclar en un bol la harina, sal y mantequilla trabajándolos bien con las manos. Quedará una masa arenosa, parecido como cuando hacéis masa brisa
2. En un bol pequeño aparte, mezclar el agua tebia, el azucar- o edulcorante- y la levadura. En la receta se aconseja no remover con cuchara de metal por la levadura. Francamente no lo había leído nunca, y algunos diréis que es muy obvio... en fin. Pues nada removi con los deditos, y punto. Dejar aparte hasta que la superficie se haga como espumosa.
3. Mezclar la yema con el yogur y adicionarlo a la mezcla del punto 1. Luego, adicionar lo que tenéis preparado del punto 2 (levadura, agua y azúcar)
4. Trabajarlo todo bien por unos 10 minutos (si veis que la masa ya está bien unida, pueden ser menos incluso). Tapar el bol con un trapo limpio y dejar reposar en un lugar cálido por 30 min.
5. Ahora, la fase de estirado y doblado repetido. No la saltéis!!! eso es lo que da el aspecto interno de "puff" aireado. Estender la masa sobre una superficie enharinada hasta formar un rectángulo. El que hice yo tendria unos 30x15cm aproximadamente. No hace falta que esté muy fina la masa, de hecho mejor que no.
6. Ahora, de este rectángulo dobláis la parte izquierda y derecha hacia adentro, y también la parte superior e inferior, como si hiciérais un paquetito con él. En esas horas siempre pienso ¿por que no habré tomado una foto de eso? Pensad que es un poco como un sobre, vale? más o menos la dinámica de un sobre, pero bien plegadito. Y dejar reposar otros 30 minutos.
7. REPETIR los pasos 5 y 6, dos veces más. Es decir, estirar y volver a doblar, otro descanso de 30 min. Estirar y volver a doblar, otro descanso de 30 min.
8. En ese último descanso de 30 min (tercer doblado), precalentar el horno a 190ºC.
9. Cuando ya hayan pasado estos ultimos 30 min, extender la masa en forma de rectángulo (no muy fino, para que queden altos los puff) y cortar con un cortapastas redondito o cuadradito. Van a crecer y sobretodo hacia arriba. Intentad ajustar bien el corte, porque esa masa no es como otras que cogéis lo sobrante, lo volveis a estirar y cortar más. Tiene sus doblados ya bien determinados y no va a quedar nada bien volver a estirarla para volver a cortar. Aprovechad lo que os ha sobrado de las bordas para hornear en forma de espirales o bastoncitos, también quedan buenos así sin más.
10. Batir ligeramente la clara que habéis reservado y pincelarla sobre los puff. Poner una cantidad generosa de queso rallado encima de cada uno.
11. Hornear por unos 15-20 min hasta que hayan crecido y el queso se vea gratinado por arriba. Dejar entibiar sobre una rejilla, pero realmente estan geniales calentitos.
Así les serví ayer:
Sí reconozco que es un poco laboriosa pero estan buenisimos!! probadlos y ya me contaréis.
Salut!
Bueno, yo surfeo mucho por páginas de cocina, muchas son inglesas y americanas, pero traen recetas de todas las etnias. Me suelen llamar la atención recetas más bien de reposteria o que trabajen masas (mi pasión absoluta), y/o que llevan queso o mezclas exóticas aunque esto último en mi casa se lo miran con lupa.
Bien pues vi esto y la verdad el aspecto y la idea eran estupendos. La primera vez leí mal y no entendí que había 4 descansos de media hora, y pensé... viernes por la noche lo hago. Cuando, receta en mano, la leí entera, entonces lo descarté para viernes noche y la hice la tarde de sábado. Veréis que claro, con los descansos que tiene entremedio, muy rápida no es que sea, pero os aseguro de verdad de la buena que vale la pena.
Bien, eso es lo que vais a necesitar, aparte de tiempo. Yo hice un tercio de las cantidades de la receta y me ha dado unos 15-20 puffs. Para probar y para dos, más que suficiente. Os dejo las medidas de lo que hice yo pero vamos, si sois más haced más porque son irresistibles.
Ingredientes:
- 170g de harina
- 1/2 paquete de levadura de pan seca tipo Maizena
- 1/3 de cucharada de te de azucar (en mi caso pues puse una cucharada de edulcorante)
- 30 ml de agua tebia
- 70 g de mantequilla sin sal
- 1/2 cucharada sopera de sal
- 1 huevo separado en yema y clara
- 2 cucharadas soperas de yogur griego
- aprox. 70g de queso rallado (yo usé emmental que era el que tenia, pero si teneis cheddar, estupendo)
¿Cómo se hace?
1. Mezclar en un bol la harina, sal y mantequilla trabajándolos bien con las manos. Quedará una masa arenosa, parecido como cuando hacéis masa brisa
2. En un bol pequeño aparte, mezclar el agua tebia, el azucar- o edulcorante- y la levadura. En la receta se aconseja no remover con cuchara de metal por la levadura. Francamente no lo había leído nunca, y algunos diréis que es muy obvio... en fin. Pues nada removi con los deditos, y punto. Dejar aparte hasta que la superficie se haga como espumosa.
3. Mezclar la yema con el yogur y adicionarlo a la mezcla del punto 1. Luego, adicionar lo que tenéis preparado del punto 2 (levadura, agua y azúcar)
4. Trabajarlo todo bien por unos 10 minutos (si veis que la masa ya está bien unida, pueden ser menos incluso). Tapar el bol con un trapo limpio y dejar reposar en un lugar cálido por 30 min.
5. Ahora, la fase de estirado y doblado repetido. No la saltéis!!! eso es lo que da el aspecto interno de "puff" aireado. Estender la masa sobre una superficie enharinada hasta formar un rectángulo. El que hice yo tendria unos 30x15cm aproximadamente. No hace falta que esté muy fina la masa, de hecho mejor que no.
6. Ahora, de este rectángulo dobláis la parte izquierda y derecha hacia adentro, y también la parte superior e inferior, como si hiciérais un paquetito con él. En esas horas siempre pienso ¿por que no habré tomado una foto de eso? Pensad que es un poco como un sobre, vale? más o menos la dinámica de un sobre, pero bien plegadito. Y dejar reposar otros 30 minutos.
7. REPETIR los pasos 5 y 6, dos veces más. Es decir, estirar y volver a doblar, otro descanso de 30 min. Estirar y volver a doblar, otro descanso de 30 min.
8. En ese último descanso de 30 min (tercer doblado), precalentar el horno a 190ºC.
9. Cuando ya hayan pasado estos ultimos 30 min, extender la masa en forma de rectángulo (no muy fino, para que queden altos los puff) y cortar con un cortapastas redondito o cuadradito. Van a crecer y sobretodo hacia arriba. Intentad ajustar bien el corte, porque esa masa no es como otras que cogéis lo sobrante, lo volveis a estirar y cortar más. Tiene sus doblados ya bien determinados y no va a quedar nada bien volver a estirarla para volver a cortar. Aprovechad lo que os ha sobrado de las bordas para hornear en forma de espirales o bastoncitos, también quedan buenos así sin más.
10. Batir ligeramente la clara que habéis reservado y pincelarla sobre los puff. Poner una cantidad generosa de queso rallado encima de cada uno.
11. Hornear por unos 15-20 min hasta que hayan crecido y el queso se vea gratinado por arriba. Dejar entibiar sobre una rejilla, pero realmente estan geniales calentitos.
Así les serví ayer:
Sí reconozco que es un poco laboriosa pero estan buenisimos!! probadlos y ya me contaréis.
Salut!
dissabte, 11 de maig del 2013
El pan 'overnight'
La verdad es que no sabía muy bien como llamar este pan, dado que no es tan facil ni tan evidente como la receta que leí sugiere. Lo que sí es verdad es que hace falta empezar el dia antes, así que si no disponéis de este tiempo, mejor optar por alguna de las recetas que consumen menos tiempo, que tengo otras.
Cuando lo metí en el horno pensé que menos mal que tenia pan de recambio que habia hecho ayer porque no pintaba que fuese a quedar muy bien. Cuando a los 20 minutos fui a destaparlo para los siguientes 20, tuve que admitir que su aspecto era ESTUPENDO. No hay que perder la fe! Os voy diciendo porque igual vais a pensar lo mismo que yo.... eso no va a funcionar ni a la de tres. Y sí que funciona!! pero yo voy a sugerir algun truquillo para que no os pase lo que a mí, ya os contaré.
Recordad que necesitáis empezar por lo menos unas 12-13 horas antes y luego añadir unos 40 o 50 minutos más de horneado.
Ingredientes:
- 3 tazas de harina de fuerza (parecerá una tontería pero el pan siempre queda mejor con ésta; se puede usar la otra, claro está pero entonces no puedo asegurar el resultado porque solo probé con la de fuerza)
- 1/4 de cucharadita de levadura de pan instantanea tipo Maizena. La receta ponía esa, y aunque tengo de las dos y generalmente uso la levadura en tableta, fresca, decidí no innovar pero debería funcionar igual
- 1 cucharadita de sal
- 1 y 1/2 taza de agua tébia
También vais a necesitar una olla o cazo altito que se pueda tapar, y que ambos, olla y tapa, aguanten estar sin problemas en el horno a 230 grados.
¿Cómo se hace?
1. Mezclar todos los ingredientes en un bol grande (yo puse en este orden: harina, levadura, sal y agua). Mezclar todo con una espátula, queda un poco "plastoso" pero no importa. Tapad con film plástico y la dejaréis reposar durante 12-20h. Yo dejé las 12 justitas. Prefiero dejarla en el horno cerrado y apagado, para evitar corrientes de aire y cambios bruscos de temperatura, pero para cualquier caso la encimera también vale.
2. Después de estas horas, la masa habrá crecido y burbujeado. Con una espátula, depositar esta masa sobre una superficie MUY enharinada, caso contrario se va a pegar. Doblar algunas veces la parte externa hacia el interior, como formando una especie de "bola". Veréis que no se aguanta mucho, aún está bastante "plastoso". Es normal. Si queréis manipularla con las manos ok, pero con las manos úmedas, sino se os va a pegar y hacer todo más dificil.
3. Preparar un trozo generoso de papel vegetal y depositar la masa en él. Así podeis coger las puntas del papel vegetal y 'levantar' la masa para transportarla hacia otro bol donde descansará por un espacio entre 1 y 2h más (yo dejé una horita). ---- Aí la primera cosa... cuando la fui a quitar de ahi, se quedó BASTANTE pegada en el papel vegetal y me dio un considerable trabajo. No sé si espolvorear el papel vegetal con un poquito de harina la siguiente vez. De todos modos ese fue el menor de mis problemas.
4. Cuando falte media hora para acabar el "descanso", encender el horno a 230 grados y poner ahi dentro el recipiente en el que vais a hornear el pan (estará vacío aún, claro)
5. Cuando haya transcurrido la media hora, sacad este recipiente del horno y, con la ayuda del papel vegetal, volcar vuestra masa dentro del recipiente. Vigilad de no tocar el recipiente con la mano desprotegida, estará muy caliente. Os cuento que usé una olla de las antiguas que tengo, que eran recubiertas como de cerámica. La tapa la tuve que improvisar con un molde de pastel, porque no estaba segura que la tapa de mi olla aguantase bien los 230ºC. No importa mucho como caiga la masa ahi dentro, en serio. Con cuidado para no quemaros, mover un poco el recipiente para que se distribuya de manera más o menos homogénea, y ya está. Leed al final por favor mis observaciones sobre este punto, para que no os pase lo que a mi.
6. Hornear unos 20 minutos a 230ºC con el recipiente tapado, y luego otros 20 minutos adicionales con el recipiente destapado. Cuando esté hecho, al dar golpecitos en la superficie del pan debería hacer un sonido como de "hueco". Si aún no hace, dejadle un poco más, ya que cada horno tiene su tiempo.
7. Desmoldar y enfriar sobre una rejilla.
Bien. Creo que mis problemas estuvieron en el punto 3 y luego en el desmoldado. El pan os tengo que decir que quedó MARAVILLOSO, crujiente por fuera, aerado y tierno por dentro, pero he tenido mucho trabajo intentando sacarle de la olla que usé para cocerlo. Llegué a pensar que no era posible, pero no iba a dejar que el pan me ganase la batalla!
Es una receta MUY recomendable aunque consume tiempo; pero bueno, para la siguiente vez probaré lo siguiente:
- en relación al punto 3, espolvorear un poco de harina en el papel vegetal; es posible que no se pegue tanto tanto a la hora de volcarla en el recipiente donde se va a hornear
- en relación al desmoldado: qué pasó? que se me quedó pegado en los lados y una parte del fondo de la olla que usé para hornearlo. Despegar los lados fue facil, con un cuchillo de punta redonda pero y el fondo? fue un trabajo de locos despegar sin que el pan se destruyera y aunque me esforcé, una parte del "suelo" del pan se acabó rompiendo, lo que fue una pena. Podría ser porque la olla que usé no fuese la mejor opción para este fin. Quizás un recipiente antiadherente fuese la mejor opción, aunque también os digo que utilizar un papel vegetal dentro de la olla me hubiese resuelto el problema. Es probablemente lo que haga la siguiente vez. No lo hagáis sin el papel!! en serio, sino os va a pasar lo que a mi y es una pena porque cualquier esfuerzo excesivo os romperá un pan que es bello y delicioso.
Mirad como quedó!
Un pelín laboriosa pero el resultado vale la pena, os aseguro.
Salut!
Cuando lo metí en el horno pensé que menos mal que tenia pan de recambio que habia hecho ayer porque no pintaba que fuese a quedar muy bien. Cuando a los 20 minutos fui a destaparlo para los siguientes 20, tuve que admitir que su aspecto era ESTUPENDO. No hay que perder la fe! Os voy diciendo porque igual vais a pensar lo mismo que yo.... eso no va a funcionar ni a la de tres. Y sí que funciona!! pero yo voy a sugerir algun truquillo para que no os pase lo que a mí, ya os contaré.
Recordad que necesitáis empezar por lo menos unas 12-13 horas antes y luego añadir unos 40 o 50 minutos más de horneado.
Ingredientes:
- 3 tazas de harina de fuerza (parecerá una tontería pero el pan siempre queda mejor con ésta; se puede usar la otra, claro está pero entonces no puedo asegurar el resultado porque solo probé con la de fuerza)
- 1/4 de cucharadita de levadura de pan instantanea tipo Maizena. La receta ponía esa, y aunque tengo de las dos y generalmente uso la levadura en tableta, fresca, decidí no innovar pero debería funcionar igual
- 1 cucharadita de sal
- 1 y 1/2 taza de agua tébia
También vais a necesitar una olla o cazo altito que se pueda tapar, y que ambos, olla y tapa, aguanten estar sin problemas en el horno a 230 grados.
¿Cómo se hace?
1. Mezclar todos los ingredientes en un bol grande (yo puse en este orden: harina, levadura, sal y agua). Mezclar todo con una espátula, queda un poco "plastoso" pero no importa. Tapad con film plástico y la dejaréis reposar durante 12-20h. Yo dejé las 12 justitas. Prefiero dejarla en el horno cerrado y apagado, para evitar corrientes de aire y cambios bruscos de temperatura, pero para cualquier caso la encimera también vale.
2. Después de estas horas, la masa habrá crecido y burbujeado. Con una espátula, depositar esta masa sobre una superficie MUY enharinada, caso contrario se va a pegar. Doblar algunas veces la parte externa hacia el interior, como formando una especie de "bola". Veréis que no se aguanta mucho, aún está bastante "plastoso". Es normal. Si queréis manipularla con las manos ok, pero con las manos úmedas, sino se os va a pegar y hacer todo más dificil.
3. Preparar un trozo generoso de papel vegetal y depositar la masa en él. Así podeis coger las puntas del papel vegetal y 'levantar' la masa para transportarla hacia otro bol donde descansará por un espacio entre 1 y 2h más (yo dejé una horita). ---- Aí la primera cosa... cuando la fui a quitar de ahi, se quedó BASTANTE pegada en el papel vegetal y me dio un considerable trabajo. No sé si espolvorear el papel vegetal con un poquito de harina la siguiente vez. De todos modos ese fue el menor de mis problemas.
4. Cuando falte media hora para acabar el "descanso", encender el horno a 230 grados y poner ahi dentro el recipiente en el que vais a hornear el pan (estará vacío aún, claro)
5. Cuando haya transcurrido la media hora, sacad este recipiente del horno y, con la ayuda del papel vegetal, volcar vuestra masa dentro del recipiente. Vigilad de no tocar el recipiente con la mano desprotegida, estará muy caliente. Os cuento que usé una olla de las antiguas que tengo, que eran recubiertas como de cerámica. La tapa la tuve que improvisar con un molde de pastel, porque no estaba segura que la tapa de mi olla aguantase bien los 230ºC. No importa mucho como caiga la masa ahi dentro, en serio. Con cuidado para no quemaros, mover un poco el recipiente para que se distribuya de manera más o menos homogénea, y ya está. Leed al final por favor mis observaciones sobre este punto, para que no os pase lo que a mi.
6. Hornear unos 20 minutos a 230ºC con el recipiente tapado, y luego otros 20 minutos adicionales con el recipiente destapado. Cuando esté hecho, al dar golpecitos en la superficie del pan debería hacer un sonido como de "hueco". Si aún no hace, dejadle un poco más, ya que cada horno tiene su tiempo.
7. Desmoldar y enfriar sobre una rejilla.
Bien. Creo que mis problemas estuvieron en el punto 3 y luego en el desmoldado. El pan os tengo que decir que quedó MARAVILLOSO, crujiente por fuera, aerado y tierno por dentro, pero he tenido mucho trabajo intentando sacarle de la olla que usé para cocerlo. Llegué a pensar que no era posible, pero no iba a dejar que el pan me ganase la batalla!
Es una receta MUY recomendable aunque consume tiempo; pero bueno, para la siguiente vez probaré lo siguiente:
- en relación al punto 3, espolvorear un poco de harina en el papel vegetal; es posible que no se pegue tanto tanto a la hora de volcarla en el recipiente donde se va a hornear
- en relación al desmoldado: qué pasó? que se me quedó pegado en los lados y una parte del fondo de la olla que usé para hornearlo. Despegar los lados fue facil, con un cuchillo de punta redonda pero y el fondo? fue un trabajo de locos despegar sin que el pan se destruyera y aunque me esforcé, una parte del "suelo" del pan se acabó rompiendo, lo que fue una pena. Podría ser porque la olla que usé no fuese la mejor opción para este fin. Quizás un recipiente antiadherente fuese la mejor opción, aunque también os digo que utilizar un papel vegetal dentro de la olla me hubiese resuelto el problema. Es probablemente lo que haga la siguiente vez. No lo hagáis sin el papel!! en serio, sino os va a pasar lo que a mi y es una pena porque cualquier esfuerzo excesivo os romperá un pan que es bello y delicioso.
Mirad como quedó!
Un pelín laboriosa pero el resultado vale la pena, os aseguro.
Salut!
dimecres, 8 de maig del 2013
Galletas tipo "cheez-it"
Sí, tengo que decir que no sabia muy bien lo que era cheez-it. No soy mucho de comprar galletas en el super, y me temo que estas tampoco son muy típicas de aqui. Como leo muchas recetas americanas e inglesas, pues algo de eso será. Se ve que son unas galletitas de queso muy apreciadas. Yo miré la receta y pensé... tate... como no iba a hacer pan de queso porque me faltaban ingredientes, unas galletas de queso para animar el sábado, rápidas y aparentemente muy buenas.
Y anda que lo han animado sí! suerte que hice la foto antes que empezaran a comer porque literalmente las han combatido casi todas!
Así que os dejo la receta, que no lleva nada de otro mundo, para que sorprendáis vuestra familia o invitados... ;-)
Ingredientes: (me dio para un plato fondo bien lleno de galletas cuadraditas)
- 76 g de queso rallado. Es una cantidad aproximada porque hago conversión a partir de "onzas", y porque también hice la tercera parte de la receta (entera me parecía exagerado). La receta sugería usar queso cheddar pero no lo tenía, así que usé una mezcla de parmesano en polvo, queso rallado en hilos y un poco de parmesano rallado en el momento. Usad el que tengáis, si tenéis cheddar pues estupendo.
- 80g de mantequilla
- 1/2 cucharadita de escamas de sal (yo prefiero esta pero puede ser la normal también)
- 1/3 de taza de harina
- aproximadamente 1/2 cuchara de agua fría, helada si posible. Yo pensaba que era una tontería y cualquier agua servía pero la verdad es que no queda igual. Hasta vale la pena ponerla un minutito en el congelador.
¿Cómo se hace?
1. En un bol, mezclar la mantequilla, queso, harina y sal hasta que esté todo integrado. Si tenéis un procesador de esos tipo de hacer masa genial, yo lo suelo hacer a mano.
2. Integrar la harina. Veréis que queda un poco arenoso.
3. Añadir el agua y debería formarse una masa manejable, que se desprende de las manos. Si veis que aún falta un poco, adelante pero de gota en gota. Es facil pasarsi y luego será más dificil rectificar.
4. Envolver la masa con un film plástico y dejarla descansar en la nevera por una media horita. Mientras, precalentar el horno a 180ºC.
5. Extender la masa formando un rectángulo muy finito (0,3-0,5 mm máximo). Va a ser mejor si la dividís en 2 y hacéis en 2 tandas. Yo lo suelo extender sobre papel vegetal para que no se pegue a las superficies.
6. Cortar pequeños cuadraditos. Si teneis un molde de galleta se puede usar, aunque esta vez yo corté con un cuchillo afilado porque tengo millones de moldes de galletas, pero ninguno cuadrado.
7. Hornear durante unos 15-20 min pero depende mucho del horno, del tipo de queso que habéis puesto.... lo que veréis es que empiezan a ponerse como 'fofas' y ligeramente morenitas por los bordes. Estas galletitas tienen un alto teor de grasa, así que cuidado, porque pueden ir facilmente del morenito de bordes a quemado. Cuando empiecen a ponerse morenitas, sacadlas y dejadlas enfriar sobre una rejilla. Ya acabaran de endurecer cuando se enfríen.
Y quedaran así de monisimas:
Ya me contaréis que tal os han quedado!
Y anda que lo han animado sí! suerte que hice la foto antes que empezaran a comer porque literalmente las han combatido casi todas!
Así que os dejo la receta, que no lleva nada de otro mundo, para que sorprendáis vuestra familia o invitados... ;-)
Ingredientes: (me dio para un plato fondo bien lleno de galletas cuadraditas)
- 76 g de queso rallado. Es una cantidad aproximada porque hago conversión a partir de "onzas", y porque también hice la tercera parte de la receta (entera me parecía exagerado). La receta sugería usar queso cheddar pero no lo tenía, así que usé una mezcla de parmesano en polvo, queso rallado en hilos y un poco de parmesano rallado en el momento. Usad el que tengáis, si tenéis cheddar pues estupendo.
- 80g de mantequilla
- 1/2 cucharadita de escamas de sal (yo prefiero esta pero puede ser la normal también)
- 1/3 de taza de harina
- aproximadamente 1/2 cuchara de agua fría, helada si posible. Yo pensaba que era una tontería y cualquier agua servía pero la verdad es que no queda igual. Hasta vale la pena ponerla un minutito en el congelador.
¿Cómo se hace?
1. En un bol, mezclar la mantequilla, queso, harina y sal hasta que esté todo integrado. Si tenéis un procesador de esos tipo de hacer masa genial, yo lo suelo hacer a mano.
2. Integrar la harina. Veréis que queda un poco arenoso.
3. Añadir el agua y debería formarse una masa manejable, que se desprende de las manos. Si veis que aún falta un poco, adelante pero de gota en gota. Es facil pasarsi y luego será más dificil rectificar.
4. Envolver la masa con un film plástico y dejarla descansar en la nevera por una media horita. Mientras, precalentar el horno a 180ºC.
5. Extender la masa formando un rectángulo muy finito (0,3-0,5 mm máximo). Va a ser mejor si la dividís en 2 y hacéis en 2 tandas. Yo lo suelo extender sobre papel vegetal para que no se pegue a las superficies.
6. Cortar pequeños cuadraditos. Si teneis un molde de galleta se puede usar, aunque esta vez yo corté con un cuchillo afilado porque tengo millones de moldes de galletas, pero ninguno cuadrado.
7. Hornear durante unos 15-20 min pero depende mucho del horno, del tipo de queso que habéis puesto.... lo que veréis es que empiezan a ponerse como 'fofas' y ligeramente morenitas por los bordes. Estas galletitas tienen un alto teor de grasa, así que cuidado, porque pueden ir facilmente del morenito de bordes a quemado. Cuando empiecen a ponerse morenitas, sacadlas y dejadlas enfriar sobre una rejilla. Ya acabaran de endurecer cuando se enfríen.
Y quedaran así de monisimas:
Ya me contaréis que tal os han quedado!
dimecres, 1 de maig del 2013
"Lavosh" de sésamo y orégano
El sésamo me tiene prendada, y otro dia vi esta receta que me gustó mucho. Bueno no exactamente esta, pero se parece bastante. No me habia parado a pensar en lo que era exactamente un lavosh o cual era su origen.
Mirando un poco por ahi, he visto que la casualidad me llevó hasta este tipo de masa que puede ser utilizada tierna o más sólida (como en esta receta), y se usa mucho en Armenia, Iran, Persia, Turquia etc. Tengo amigos de varias de estas etnias, así que queda la receta como una homenaje a estas personas tan queridas: Ara Malikian por Armenia, y Agrin Moeini por Iran.
Es una receta facil, en una media horita lo podéis tener listos. Yo la siguiente vez miraré de acompañarlo con alguna salsa, que aún me la tengo que pensar. Me gusta mucho el tahin pero me parece repetitivo volver al sésamo en este caso. Tal vez un hummus o algo improvisado con berenjena.
Ingredientes: (os rendirá 2 bandejas de horno llenas... tambien podéis hacer la mitad como yo pero entonces cuesta más de medir algunas cantidades)
- 1 taza de harina blanca
- 1/2 taza de harina integral
- 2 cucharadas de semilla de sésamo variadas (podeis usar una mezcla de crudas, tostadas, negras...)
- 1 cucharada de orégano picado
- 1 cucharadita de sal
- 1/4 de taza de aceite de oliva
- 2 cucharadas de tahin (salsa de sésamo). De hecho la receta ponia una cucharadita de aceite de sésamo, si lo tenéis, estupendo haced como la receta. Con tahin también quedó bien. Si no tenéis ni uno ni otro pues aceite de oliva, no tendrá un gusto tan remarcado pero no pasa nada.
- 1/2 taza de agua. Es un valor aproximado, es mejor ir echando de a poquito, debe quedar una masa blanda pero que se pueda manipular, más consistente que la del pan.
- Aceite de oliva para pintar
- Sal en escamas o sal marina
¿Cómo se hace?
1. Precalentar el horno a 160-170ºC. Dejar fuera la bandeja y prepararla con papel vegetal.
2. En un bol, mezclar la harina, harina integral, sésamo, orégano y sal
3. Añadir los aceites (o el aceite + tahin), y el agua ir echando poco a poco hasta obtener la consistencia de masa blanda. Es mejor no echar todo el agua de golpe porque las distintas marcas de harina tienen distintas humedades, y eso solo se ve in situ.
4. Dividir la masa en 4 partes y amasarla y cortar por tandas. Extenderla sobre una superficie enharinada, hasta quedar casi transparente de tan fino. Luego, cortar en tiras largas.
5. Ponerlas en la bandeja del horno, pintar con aceite y espolvorear con sal en escamas o marina.
6. Hornear durante unos 15 minutos (yo dejé un poquito más, unos 25, quizás no estaban tan finas como se supone que deberían ser). Empiezan a ponerse doraditas en los bordes, ese es el momento de quitarlas y dejar enfriar sobre una rejilla.
Mirad que monos:
Quedaron estupendos y saladitos. Probadlos y ya me contaréis ;)
Mirando un poco por ahi, he visto que la casualidad me llevó hasta este tipo de masa que puede ser utilizada tierna o más sólida (como en esta receta), y se usa mucho en Armenia, Iran, Persia, Turquia etc. Tengo amigos de varias de estas etnias, así que queda la receta como una homenaje a estas personas tan queridas: Ara Malikian por Armenia, y Agrin Moeini por Iran.
Es una receta facil, en una media horita lo podéis tener listos. Yo la siguiente vez miraré de acompañarlo con alguna salsa, que aún me la tengo que pensar. Me gusta mucho el tahin pero me parece repetitivo volver al sésamo en este caso. Tal vez un hummus o algo improvisado con berenjena.
Ingredientes: (os rendirá 2 bandejas de horno llenas... tambien podéis hacer la mitad como yo pero entonces cuesta más de medir algunas cantidades)
- 1 taza de harina blanca
- 1/2 taza de harina integral
- 2 cucharadas de semilla de sésamo variadas (podeis usar una mezcla de crudas, tostadas, negras...)
- 1 cucharada de orégano picado
- 1 cucharadita de sal
- 1/4 de taza de aceite de oliva
- 2 cucharadas de tahin (salsa de sésamo). De hecho la receta ponia una cucharadita de aceite de sésamo, si lo tenéis, estupendo haced como la receta. Con tahin también quedó bien. Si no tenéis ni uno ni otro pues aceite de oliva, no tendrá un gusto tan remarcado pero no pasa nada.
- 1/2 taza de agua. Es un valor aproximado, es mejor ir echando de a poquito, debe quedar una masa blanda pero que se pueda manipular, más consistente que la del pan.
- Aceite de oliva para pintar
- Sal en escamas o sal marina
¿Cómo se hace?
1. Precalentar el horno a 160-170ºC. Dejar fuera la bandeja y prepararla con papel vegetal.
2. En un bol, mezclar la harina, harina integral, sésamo, orégano y sal
3. Añadir los aceites (o el aceite + tahin), y el agua ir echando poco a poco hasta obtener la consistencia de masa blanda. Es mejor no echar todo el agua de golpe porque las distintas marcas de harina tienen distintas humedades, y eso solo se ve in situ.
4. Dividir la masa en 4 partes y amasarla y cortar por tandas. Extenderla sobre una superficie enharinada, hasta quedar casi transparente de tan fino. Luego, cortar en tiras largas.
5. Ponerlas en la bandeja del horno, pintar con aceite y espolvorear con sal en escamas o marina.
6. Hornear durante unos 15 minutos (yo dejé un poquito más, unos 25, quizás no estaban tan finas como se supone que deberían ser). Empiezan a ponerse doraditas en los bordes, ese es el momento de quitarlas y dejar enfriar sobre una rejilla.
Mirad que monos:
Quedaron estupendos y saladitos. Probadlos y ya me contaréis ;)
Bocaditos tiernos de ajo y queso
Ésta es una de las cosas más apetecibles que he hecho en los ultimos días, pero inexplicablemente y precisamente por eso, tardé en subirla, quería apuntarla bien porque la tuve que adaptar un poco.
Muchas veces leo recetas en inglés, por algunas ideas que saco de la aplicación "Stumble Upon", una especie de buscador donde tú defines el tema que quieres y él va sacando páginas sobre ésto. Bien pues esto estaba catalogado como "endiabladamente bueno" y eso más que nada me movió a hacerlo.
Cuando empecé a leer, hablaba de algo como "biscuit mix", que yo no solo no tenia, como tampoco probablemente podia comprar, ya que suelen ser cosas muy específicas de cierto país o región; pero al leer un poco más, descubrí que podia hacer un biscuit mix yo misma en un pispás. De modo que voy a poner toda la receta aqui, y veréis que aperitivo tan bueno podéis hacer.
Ingredientes (lo de cuantos pues ya dependerá un poco del tamaño que les hagáis, recomiendo hacerlos pequeñitos que los míos, quedaran más delicados - llenará una bandeja de horno)
- 2 tazas de harina (una normalita, nada especial)
- 1 cucharita rasa de levadura química
- 1/2 cucharada de te de azúcar
- 1/2 cucharada de te de sal
- 1/3 taza de aceite de girasol
(eso os hará el famoso "biscuit mix" o por lo menos fueron las indicaciones que encontré)
- 1/2 cucharada sopera de ajo en polvo
- 1 taza de queso rallado
- 2 tazas de leche
- 1 cucharadita de sal
- 2 cucharadas soperas de mantequilla
- 2 cucharadas de te de orégano
- 1 cucharada de te de ajo en polvo (sí sé que está repetido, no me equivoqué: estos tres ultimos ingredientes serán para pincelar en los minutos finales de horno)
¿Cómo se hace? tómate media horita y sorprende tus invitados :-)
1. Precalentar el horno a unos 200ºC. Dejad fuera la bandeja del horno y cubridla con papel vegetal.
2. Reunir en un bol los cinco primeros ingredientes, que os comento arriba que son para el biscuit mix
3. Añadir al bol el queso rallado, la media cucharada sopera de ajo en polvo, la leche y la sal. Mezclar todo muy bien.
4. Hacer pequeños bocaditos y ponerlos en la bandeja de horno, ligeramente separados (van a crecer un poco). Hornearlos por, aproximadamente, 10 minutos. Tenéis que ver que se ponen más doraditos.
5. Mientras tanto, derretir la mantequilla en un bol en el microondas, y mezclarle el orégano y la última cucharada de ajo en polvo. Cuando hayan pasado los 10 minutos de horno, sacar la bandeja y pincelar los bocaditos con ésta mezcla de mantequilla, orégano y ajo. Volver a al horno por 5 minutos más (yo puse función de aire caliente para acabar de dejarle crujiente).
6. Dejar enfriar sobre una rejilla.
Listo!
Así más o menos quedaran:
Os va a encantar, prometido!
Salut ;)
Muchas veces leo recetas en inglés, por algunas ideas que saco de la aplicación "Stumble Upon", una especie de buscador donde tú defines el tema que quieres y él va sacando páginas sobre ésto. Bien pues esto estaba catalogado como "endiabladamente bueno" y eso más que nada me movió a hacerlo.
Cuando empecé a leer, hablaba de algo como "biscuit mix", que yo no solo no tenia, como tampoco probablemente podia comprar, ya que suelen ser cosas muy específicas de cierto país o región; pero al leer un poco más, descubrí que podia hacer un biscuit mix yo misma en un pispás. De modo que voy a poner toda la receta aqui, y veréis que aperitivo tan bueno podéis hacer.
Ingredientes (lo de cuantos pues ya dependerá un poco del tamaño que les hagáis, recomiendo hacerlos pequeñitos que los míos, quedaran más delicados - llenará una bandeja de horno)
- 2 tazas de harina (una normalita, nada especial)
- 1 cucharita rasa de levadura química
- 1/2 cucharada de te de azúcar
- 1/2 cucharada de te de sal
- 1/3 taza de aceite de girasol
(eso os hará el famoso "biscuit mix" o por lo menos fueron las indicaciones que encontré)
- 1/2 cucharada sopera de ajo en polvo
- 1 taza de queso rallado
- 2 tazas de leche
- 1 cucharadita de sal
- 2 cucharadas soperas de mantequilla
- 2 cucharadas de te de orégano
- 1 cucharada de te de ajo en polvo (sí sé que está repetido, no me equivoqué: estos tres ultimos ingredientes serán para pincelar en los minutos finales de horno)
¿Cómo se hace? tómate media horita y sorprende tus invitados :-)
1. Precalentar el horno a unos 200ºC. Dejad fuera la bandeja del horno y cubridla con papel vegetal.
2. Reunir en un bol los cinco primeros ingredientes, que os comento arriba que son para el biscuit mix
3. Añadir al bol el queso rallado, la media cucharada sopera de ajo en polvo, la leche y la sal. Mezclar todo muy bien.
4. Hacer pequeños bocaditos y ponerlos en la bandeja de horno, ligeramente separados (van a crecer un poco). Hornearlos por, aproximadamente, 10 minutos. Tenéis que ver que se ponen más doraditos.
5. Mientras tanto, derretir la mantequilla en un bol en el microondas, y mezclarle el orégano y la última cucharada de ajo en polvo. Cuando hayan pasado los 10 minutos de horno, sacar la bandeja y pincelar los bocaditos con ésta mezcla de mantequilla, orégano y ajo. Volver a al horno por 5 minutos más (yo puse función de aire caliente para acabar de dejarle crujiente).
6. Dejar enfriar sobre una rejilla.
Listo!
Así más o menos quedaran:
Os va a encantar, prometido!
Salut ;)
dissabte, 27 d’abril del 2013
Muffin individual de plátano y avena (by Mi Ennes)
Notad que no son "muffins" sino "muffin". Sí, solo uno :)
Como se han puesto tan de moda las recetas individuales, pues había que probarlas, eso por un lado. Me costaba creer que una vez hecho se despegase de la taza pero os prometo que se ha caído solito y sin engrasar la taza ni nada.
Por otro lado, cabe remarcar que esa receta no es mía sino que la leí en material de mi amiga Michelle Ennes. Para mi la receta es suya y por una vez, no cambié nada :) Nosotras dos, y otras amigas también, hemos hecho reeducación alimentaria y adherido a una nova manera de enfocar la nutrición. Sin dietas locas, sin pasar hambre, simplemente reorientar la manera de hacer las cosas enfocado a un cuerpo sano y buenos hábitos. Este muffin es un ejemplo de algo que se puede hacer y está muy bien. Hombre, tiene sus calorías eso está claro. Siempre suelo decir que lo que no es aire o agua... engorda. No hay más. Pero no es a eso a lo que vamos, sino que se puede hacer algo individual, nutritivo y bueno, siendo saludable a la vez, adecuado a una reeducación alimentaria. Además si hacéis deporte como nosotras, veréis que es una estupenda manera de reponer energía.
Ingredientes:
- 1 huevo
- 1/4 taza de salvado de avena
- 1 cucharada de te de edulcorante líquido
- 1 cucharadita de levadura química
- 1 plátano cortado en pedacitos pequeños
Obs: también vais a necesitar horno microondas, y una taza de las grandecitas, adecuada para microondas (la mayoría lo son)
¿Cómo se hace?
Más facil ya es imposible
1. Poner todos los ingredientes menos el plátano en la taza
2. Bater ligeramente con un tenedor para integrar todo
3. Echar el plátano picado en la mezcla
4. Poner en el microondas. Cúanto? pues ya depende de la potencia de cada uno. El mío estuvo unos 2 minutos a 540W de potencia. Primero puse 1min30s y luego los 30 segundos ultimos que me parecieron necesarios. Probablemente de haberlo hecho a 720W, estaria listo en 1min30s. Veréis que va subiendo y en algun momento sobrepasará la taza pero por lo menos el mío no rebasó, porque ya estaba bastante hecho. Cuando se acabe, dejarlo 1 minutito que se acabe la cocción ya que sabeis que lo del microondas aún sigue un ratito después de apagarlo. Y solo queda volcarlo sobre un plato y listo!
(yo espolvoreé con un poco de stevia la verdad, quizás sugeriria como opción hacerlo directamente con stevia y no con edulcorante líquido)
Así quedó:
Lo extremadamente práctico de esas cosas son lo de porción única. Evitará tentaciones de seguir comiendo "por inércia", evitará que se seque el muffin, que se estropee, etc. A los que les de igual las calorías siempre pueden hacer un topping con una ganaché ligera de chocolate, o un poquito de crema pastelera o servirlo con una mermelada.... es perfecto. (Igualmente, todo lo que cité se puede hacer sin azúcar, reduciendo el aporte calórico)
Y aqui lo dejamos por hoy, pero el mundo de cosas en una taza parece ser un vasto campo a explorar... ya volveremos a ello.
Salut!
Como se han puesto tan de moda las recetas individuales, pues había que probarlas, eso por un lado. Me costaba creer que una vez hecho se despegase de la taza pero os prometo que se ha caído solito y sin engrasar la taza ni nada.
Por otro lado, cabe remarcar que esa receta no es mía sino que la leí en material de mi amiga Michelle Ennes. Para mi la receta es suya y por una vez, no cambié nada :) Nosotras dos, y otras amigas también, hemos hecho reeducación alimentaria y adherido a una nova manera de enfocar la nutrición. Sin dietas locas, sin pasar hambre, simplemente reorientar la manera de hacer las cosas enfocado a un cuerpo sano y buenos hábitos. Este muffin es un ejemplo de algo que se puede hacer y está muy bien. Hombre, tiene sus calorías eso está claro. Siempre suelo decir que lo que no es aire o agua... engorda. No hay más. Pero no es a eso a lo que vamos, sino que se puede hacer algo individual, nutritivo y bueno, siendo saludable a la vez, adecuado a una reeducación alimentaria. Además si hacéis deporte como nosotras, veréis que es una estupenda manera de reponer energía.
Ingredientes:
- 1 huevo
- 1/4 taza de salvado de avena
- 1 cucharada de te de edulcorante líquido
- 1 cucharadita de levadura química
- 1 plátano cortado en pedacitos pequeños
Obs: también vais a necesitar horno microondas, y una taza de las grandecitas, adecuada para microondas (la mayoría lo son)
¿Cómo se hace?
Más facil ya es imposible
1. Poner todos los ingredientes menos el plátano en la taza
2. Bater ligeramente con un tenedor para integrar todo
3. Echar el plátano picado en la mezcla
4. Poner en el microondas. Cúanto? pues ya depende de la potencia de cada uno. El mío estuvo unos 2 minutos a 540W de potencia. Primero puse 1min30s y luego los 30 segundos ultimos que me parecieron necesarios. Probablemente de haberlo hecho a 720W, estaria listo en 1min30s. Veréis que va subiendo y en algun momento sobrepasará la taza pero por lo menos el mío no rebasó, porque ya estaba bastante hecho. Cuando se acabe, dejarlo 1 minutito que se acabe la cocción ya que sabeis que lo del microondas aún sigue un ratito después de apagarlo. Y solo queda volcarlo sobre un plato y listo!
(yo espolvoreé con un poco de stevia la verdad, quizás sugeriria como opción hacerlo directamente con stevia y no con edulcorante líquido)
Así quedó:
Lo extremadamente práctico de esas cosas son lo de porción única. Evitará tentaciones de seguir comiendo "por inércia", evitará que se seque el muffin, que se estropee, etc. A los que les de igual las calorías siempre pueden hacer un topping con una ganaché ligera de chocolate, o un poquito de crema pastelera o servirlo con una mermelada.... es perfecto. (Igualmente, todo lo que cité se puede hacer sin azúcar, reduciendo el aporte calórico)
Y aqui lo dejamos por hoy, pero el mundo de cosas en una taza parece ser un vasto campo a explorar... ya volveremos a ello.
Salut!
Chips vegetales de horno
Aunque es verdad que esa semana hice muchas, muchas cosas en la cocina, las mejores aún no consegui subir al blog, por falta de tiempo. No obstante, esto he hecho ayer, por primera vez resultó muy cercano a lo que yo quería, y vale la pena. Por facil, por sana y por acompañamiento original.
A casi todo el mundo le gustan los chips. A mi personalmente no me emocionan ni vician pero en fin, reconozco que hay algunos que saben bien. Pero cual es el problema con los chips de bolsa, estos del super? que estan llenos de grasas malas y sal, calorías vacías que no aportan practicamente nada al cuerpo y además engordan mucho. Una alternativa serian los chips vegetales que os propongo, que los vamos a hacer en el horno, sin apenas grasa, y apenas un toque de sal marina al final, muy poquita.
A por ellos.
Ingredientes (para 2-3 personas, en plan picoteo, si sois más o vais a hacer un acompañamiento a un plato, recomiendo hacer el doble)
- 1 patata mediana pelada
- 1 remolacha (cruda!! no cojáis esas que venden aqui en conserva) pelada
- 1 boniato mediano pelado (o la mitad de uno grande)
- 1 cucharada sopera de aceite de oliva virgen
- sal marina o sal maldon para espolvorear
¿Cómo se hace?
Muy facil!
1. Precalentar el horno a unos 200ºC, dejad fuera las bandejas del horno y cubridlas con papel vegetal
2. Ahora viene la parte que hay que tener paciencia. Con el pelador de patatas o una mandolina que pueda regularse, hacer lonchitas muy finas, casi transparentes, de los vegetales. Atención: si quedan gruesas no funcionará bien. Lo mejor sin duda es el pelador de patatas, aunque os va a parecer que tardáis una eternidad. (Dica: mantened la remolacha en un plato aparte, sino 'contaminará' de rosa todo lo demás. Las patatas y boniatos pueden ocupar el mismo plato)
3. Esa cucharada de aceite es todo lo que vais a usar, así que repartidla entre los dos platos con los vegetales, y ayudad con las manos a que se mezclen todas las lonchitas con un poco de aceite.
4. Horneado: aqui no pueden haber prisas porque no se pueden acumular todos los vegetales. No pueden estar unos por encima de los otros, deben estar en una disposición de camada única y sin tocarse aunque pueden estar cercanos. Yo para estos vegetales, hice tres tandas de horneado, intentando no mezclarlos por intuir que el tiempo para hornear cada uno pudiese ser ligeramente distinto. Ponedlos en el horno durante 10-12 minutos pero con un ojo ahí, cuando los bordes empiecen a mostrarse morenitos, les falta muy poco - y los boniatos se han hecho más rapido que los otros dos, así que no toméis el tiempo de uno como referencia para otro. Como son tan finos, si os pasáis de punto se carbonizaran. No os preocupéis que a la que se enfríen, cosa rápida, se pondran crujientes.
Luego de hornearlos se pueden mezclar todos, lo que dará un bello colorido, y echar un poquito, muy poquito de sal marina o maldon. Un pica-pica sano, colorido y original.
Como alternativas, pues se podrian usar zanahorias o yuca aunque tengo que decir que no probé tiempo de horneado para estos. Habrá que probar.
Mirad que monisimo me quedó ayer, aunque algun boniato se pasó un pelin de punto, no dejéis que eso suceda con los vuestros!!
Sorprended vuestros invitados con algo diferente y más sano.
Eatclean! ;))
salud.
A casi todo el mundo le gustan los chips. A mi personalmente no me emocionan ni vician pero en fin, reconozco que hay algunos que saben bien. Pero cual es el problema con los chips de bolsa, estos del super? que estan llenos de grasas malas y sal, calorías vacías que no aportan practicamente nada al cuerpo y además engordan mucho. Una alternativa serian los chips vegetales que os propongo, que los vamos a hacer en el horno, sin apenas grasa, y apenas un toque de sal marina al final, muy poquita.
A por ellos.
Ingredientes (para 2-3 personas, en plan picoteo, si sois más o vais a hacer un acompañamiento a un plato, recomiendo hacer el doble)
- 1 patata mediana pelada
- 1 remolacha (cruda!! no cojáis esas que venden aqui en conserva) pelada
- 1 boniato mediano pelado (o la mitad de uno grande)
- 1 cucharada sopera de aceite de oliva virgen
- sal marina o sal maldon para espolvorear
¿Cómo se hace?
Muy facil!
1. Precalentar el horno a unos 200ºC, dejad fuera las bandejas del horno y cubridlas con papel vegetal
2. Ahora viene la parte que hay que tener paciencia. Con el pelador de patatas o una mandolina que pueda regularse, hacer lonchitas muy finas, casi transparentes, de los vegetales. Atención: si quedan gruesas no funcionará bien. Lo mejor sin duda es el pelador de patatas, aunque os va a parecer que tardáis una eternidad. (Dica: mantened la remolacha en un plato aparte, sino 'contaminará' de rosa todo lo demás. Las patatas y boniatos pueden ocupar el mismo plato)
3. Esa cucharada de aceite es todo lo que vais a usar, así que repartidla entre los dos platos con los vegetales, y ayudad con las manos a que se mezclen todas las lonchitas con un poco de aceite.
4. Horneado: aqui no pueden haber prisas porque no se pueden acumular todos los vegetales. No pueden estar unos por encima de los otros, deben estar en una disposición de camada única y sin tocarse aunque pueden estar cercanos. Yo para estos vegetales, hice tres tandas de horneado, intentando no mezclarlos por intuir que el tiempo para hornear cada uno pudiese ser ligeramente distinto. Ponedlos en el horno durante 10-12 minutos pero con un ojo ahí, cuando los bordes empiecen a mostrarse morenitos, les falta muy poco - y los boniatos se han hecho más rapido que los otros dos, así que no toméis el tiempo de uno como referencia para otro. Como son tan finos, si os pasáis de punto se carbonizaran. No os preocupéis que a la que se enfríen, cosa rápida, se pondran crujientes.
Luego de hornearlos se pueden mezclar todos, lo que dará un bello colorido, y echar un poquito, muy poquito de sal marina o maldon. Un pica-pica sano, colorido y original.
Como alternativas, pues se podrian usar zanahorias o yuca aunque tengo que decir que no probé tiempo de horneado para estos. Habrá que probar.
Mirad que monisimo me quedó ayer, aunque algun boniato se pasó un pelin de punto, no dejéis que eso suceda con los vuestros!!
Sorprended vuestros invitados con algo diferente y más sano.
Eatclean! ;))
salud.
dimecres, 17 d’abril del 2013
Croquetas frías de sardina
Esa receta la vi por casualidad en la página de canal cocina, y en un primer momento pensé que era una receta caliente. Al seguir leyendo y ver que era una receta fría y relativamente sencilla, me gustó aún más. No suelo hacer demasiada cosas con sardina, por no tener mucho repertorio creativo, pero ésta receta la verdad es que está muy bien.
En épocas de tiempo cálido apetecen las comidas frías, al contrario del invierno, donde echamos de menos comida caliente y reconfortante. Pero veréis que es facil, sencilla, rápida y muy adecuada para esta época, no necesita horno, ni freidora, ni plancha ni nada.
Es más bien un entrante, aunque yo lo combiné con una ensalada y eso fue la cena, porque somos más bien de comer ligerito. Modifiqué un pelín alguna cosa por no tener exactamente todos los ingredientes que llevaba, así que os pondré la que finalmente hice yo y sé que funciona bien.
Ingredientes: (os dará unas 10 croquetas de tamaño de una albóndiga)
- 2 latas de sardina en aceite, escurridas
- 3 huevos (una vez cocidos solo aprovecharéis las yemas; las claras cocidas las guardaréis para otra receta)
- 3 rebanadas de pan de molde
- 6 cucharadas soperas de leche
- 1 cucharadita de pimentón dulce
- 1/2 cucharadita de sal, aproximadamente (según el gusto de cada uno, será un poco más o un poco menos)
- zumo de 1/2 limón
- 30 g de queso de untar (yo puse light, pero también os sirve del normal claro)
- 6 tostadas de pan integral (del tipo silueta, de las grandecitas; a efectos también sirven rebanadas de pan del dia anterior, que las tostaréis en la tostadora)
- perejil y cebollino para decorar
¿Cómo se hace?
1. Poner a cocer los huevos en agua. Al levantar el hervor, dejar cocer durante 10 minutos y luego enfriarlos bajo el agua. Pelarlos y separar las claras de las yemas (usaréis sólo estas últimas)
2. Poner las rebanadas de pan de molde en remojo con la leche unos minutos
3. Triturar, en el robot de cocina, las sardinas, el pan de molde remojado, la cuharadita de pimentón, la sal, las 3 yemas y el zumo de medio limón.
4. Añadir los 30g de queso de untar, mezclando bien todo para hacer una masa homogénea. Dejar reposar esta masa durante 30-60 minutos en la nevera
5. Mientras tanto, triturar las tostadas (o el pan del dia anterior que habréis tostado) hasta que queden con un granulado grande, mayor que el pan rallado
6. Retirar la mezcla del punto 4 de la nevera y hacer con ella bolitas del tamaño de una albóndiga, que luego pasaréis por la tostada triturada para que se cubran bien.
Y listo!! ponerlo en una fuente bonita y servirlo con un poco de perejil y cebollino, y veréis que rico y rapidito!
Os dejo una foto de como me quedó para animaros:
En épocas de tiempo cálido apetecen las comidas frías, al contrario del invierno, donde echamos de menos comida caliente y reconfortante. Pero veréis que es facil, sencilla, rápida y muy adecuada para esta época, no necesita horno, ni freidora, ni plancha ni nada.
Es más bien un entrante, aunque yo lo combiné con una ensalada y eso fue la cena, porque somos más bien de comer ligerito. Modifiqué un pelín alguna cosa por no tener exactamente todos los ingredientes que llevaba, así que os pondré la que finalmente hice yo y sé que funciona bien.
Ingredientes: (os dará unas 10 croquetas de tamaño de una albóndiga)
- 2 latas de sardina en aceite, escurridas
- 3 huevos (una vez cocidos solo aprovecharéis las yemas; las claras cocidas las guardaréis para otra receta)
- 3 rebanadas de pan de molde
- 6 cucharadas soperas de leche
- 1 cucharadita de pimentón dulce
- 1/2 cucharadita de sal, aproximadamente (según el gusto de cada uno, será un poco más o un poco menos)
- zumo de 1/2 limón
- 30 g de queso de untar (yo puse light, pero también os sirve del normal claro)
- 6 tostadas de pan integral (del tipo silueta, de las grandecitas; a efectos también sirven rebanadas de pan del dia anterior, que las tostaréis en la tostadora)
- perejil y cebollino para decorar
¿Cómo se hace?
1. Poner a cocer los huevos en agua. Al levantar el hervor, dejar cocer durante 10 minutos y luego enfriarlos bajo el agua. Pelarlos y separar las claras de las yemas (usaréis sólo estas últimas)
2. Poner las rebanadas de pan de molde en remojo con la leche unos minutos
3. Triturar, en el robot de cocina, las sardinas, el pan de molde remojado, la cuharadita de pimentón, la sal, las 3 yemas y el zumo de medio limón.
4. Añadir los 30g de queso de untar, mezclando bien todo para hacer una masa homogénea. Dejar reposar esta masa durante 30-60 minutos en la nevera
5. Mientras tanto, triturar las tostadas (o el pan del dia anterior que habréis tostado) hasta que queden con un granulado grande, mayor que el pan rallado
6. Retirar la mezcla del punto 4 de la nevera y hacer con ella bolitas del tamaño de una albóndiga, que luego pasaréis por la tostada triturada para que se cubran bien.
Y listo!! ponerlo en una fuente bonita y servirlo con un poco de perejil y cebollino, y veréis que rico y rapidito!
Os dejo una foto de como me quedó para animaros:
diumenge, 14 d’abril del 2013
Mousse bicolor de papaya y mango
Hace días que queria hacer algo con papaya y mango que - además del maracuyá - son sabores que me retrotraen mucho de mi país de origen. Había comprado unos muy maduritos para aprovechar su dulzor y para que apenas fuera necesario añadir edulcorante en la mousse.
Inicialmente había pensado hacer una mousse conjunta, pero luego vi una receta bicolor (bueno de hecho tricolor ya os explicaré, pero he anulado una de las capas)... y pensé pues más divertido todavía. Es conveniente hacerlo de un dia para otro.
Además aconsejo ponerlo en boles o vasos transparentes para que se aprecie bien la diferencia de colores, que el visual también es parte de los platos.
Ingredientes: (para unos 4 vasitos o boles pequeños)
- 1/2 papaya de las grandes (si es pequeña, cogedla entera entonces)
- 1/2 mango
- 200ml de nata (35% m.g.)
- edulcorante líquido del tipo sacarina (equivalente a dos cucharadas de te)
- 1 sobre de gelatina en polvo (si lo que teneis son hojas, pues 6)
- OPCIONAL: yo les hice unos ornamentos de caramelo para decorar pero no es para nada necesario. Si los queréis hacer, pues necesitáis aproximadamente media taza de azúcar
¿Cómo se hace?
1. Empezar por la capa de papaya, que sugiero que sea la de abajo: quitar las semillas y la parte interior fibrosa de la papaya, y triturar bien la pulpa. Reservar
2. Montar 100ml de nata con una cucharada de te de edulcorante líquido (yo lo suelo añadir cuando ya se ha montado)
3. Gelatina: si estáis usando en polvo, coged medio paquetito, la poneis en un bol pequeño con un par de cucharadas soperas de agua, y calentar (ojo, no demasiado, para mi 30 segundos a potencia media en el microondas fue suficiente para disolverla). Si estáis usando las hojas dejarlas en remojo un ratito y luego disolverlas también en poquita agua, calentando - igual que en polvo.
4. Añadir la pulpa de papaya a la nata y también la gelatina disuelta. Rellenar aproximadamente la mitad de vuestros boles. Llevarlo a la nevera, si es posible, un par o tres de horas sin moverles ni quitarles de ahi. Esto servirá para que esta capa vaya solidificando. Veréis que queda con un delicado color rosado, mezcla del naranja fuerte de la papaya con el blanco de la nata.
5. Luego hacer la capa de mango, exactamente igual los pasos de 1 a 4 pero con la diferencia que aqui usáis la pulpa de mango triturada. Veréis que queda amarillo suave, mezcla del amarillo fuerte del mango con la nata.
6. Depositar la capa de mango encima de la capa de papaya que ya tenéis, y llevar otra vez a la nevera. Tendréis unos mousse bicolores muy bonitos, aunque el color es suavecito.
Os cuento que la receta que vi añadia una tercera capa, blanca, de yogur griego que he obviado, pero quedaría también muy bonito y "ombré", precioso.
Yo preferí adornarlo con unos arabescos de caramelo, pero si ponéis el yogur no lo aconsejaría, dado que no tiene consistencia para que los arabescos se aguanten (mientras la mousse sí).
Para hacer los arabescos de caramelo: poner el azúcar a fundir en un cazo, y cuando esté líquido, con una cucharita dejarlo escurrir y hacer arabescos y dibujos sobre un papel vegetal. Cuando seque lo podréis despegar sin problemas. Os comento que aunque queda bonito, es mejor limpiar mientras está caliente, bueno... no mejor: indispensable. Yo no lo hice y me costó un rato quitar el caramelo solidificado, así que no cometáis el mismo error ;)
No creo que en la foto se aprecie todo lo bonito que quedó, porque no pensé que estaba haciendo la foto sobre un fondo rojo y eso desluciría el color. Pero bueno ahi la dejo, que es la que tengo! :D
Hacia la mitad del vaso, pasa de amarillo a rosita.
Teniendo la nata, no podría llamarla de light, pero bueno, está hecha de frutas y con edulcorante, con lo que reducimos también las calorías asociadas. Podéis quitar el caramelo y poner un yogur griego natural, seguro que os queda fantástico...
Ya me contaréis!
Inicialmente había pensado hacer una mousse conjunta, pero luego vi una receta bicolor (bueno de hecho tricolor ya os explicaré, pero he anulado una de las capas)... y pensé pues más divertido todavía. Es conveniente hacerlo de un dia para otro.
Además aconsejo ponerlo en boles o vasos transparentes para que se aprecie bien la diferencia de colores, que el visual también es parte de los platos.
Ingredientes: (para unos 4 vasitos o boles pequeños)
- 1/2 papaya de las grandes (si es pequeña, cogedla entera entonces)
- 1/2 mango
- 200ml de nata (35% m.g.)
- edulcorante líquido del tipo sacarina (equivalente a dos cucharadas de te)
- 1 sobre de gelatina en polvo (si lo que teneis son hojas, pues 6)
- OPCIONAL: yo les hice unos ornamentos de caramelo para decorar pero no es para nada necesario. Si los queréis hacer, pues necesitáis aproximadamente media taza de azúcar
¿Cómo se hace?
1. Empezar por la capa de papaya, que sugiero que sea la de abajo: quitar las semillas y la parte interior fibrosa de la papaya, y triturar bien la pulpa. Reservar
2. Montar 100ml de nata con una cucharada de te de edulcorante líquido (yo lo suelo añadir cuando ya se ha montado)
3. Gelatina: si estáis usando en polvo, coged medio paquetito, la poneis en un bol pequeño con un par de cucharadas soperas de agua, y calentar (ojo, no demasiado, para mi 30 segundos a potencia media en el microondas fue suficiente para disolverla). Si estáis usando las hojas dejarlas en remojo un ratito y luego disolverlas también en poquita agua, calentando - igual que en polvo.
4. Añadir la pulpa de papaya a la nata y también la gelatina disuelta. Rellenar aproximadamente la mitad de vuestros boles. Llevarlo a la nevera, si es posible, un par o tres de horas sin moverles ni quitarles de ahi. Esto servirá para que esta capa vaya solidificando. Veréis que queda con un delicado color rosado, mezcla del naranja fuerte de la papaya con el blanco de la nata.
5. Luego hacer la capa de mango, exactamente igual los pasos de 1 a 4 pero con la diferencia que aqui usáis la pulpa de mango triturada. Veréis que queda amarillo suave, mezcla del amarillo fuerte del mango con la nata.
6. Depositar la capa de mango encima de la capa de papaya que ya tenéis, y llevar otra vez a la nevera. Tendréis unos mousse bicolores muy bonitos, aunque el color es suavecito.
Os cuento que la receta que vi añadia una tercera capa, blanca, de yogur griego que he obviado, pero quedaría también muy bonito y "ombré", precioso.
Yo preferí adornarlo con unos arabescos de caramelo, pero si ponéis el yogur no lo aconsejaría, dado que no tiene consistencia para que los arabescos se aguanten (mientras la mousse sí).
Para hacer los arabescos de caramelo: poner el azúcar a fundir en un cazo, y cuando esté líquido, con una cucharita dejarlo escurrir y hacer arabescos y dibujos sobre un papel vegetal. Cuando seque lo podréis despegar sin problemas. Os comento que aunque queda bonito, es mejor limpiar mientras está caliente, bueno... no mejor: indispensable. Yo no lo hice y me costó un rato quitar el caramelo solidificado, así que no cometáis el mismo error ;)
No creo que en la foto se aprecie todo lo bonito que quedó, porque no pensé que estaba haciendo la foto sobre un fondo rojo y eso desluciría el color. Pero bueno ahi la dejo, que es la que tengo! :D
Hacia la mitad del vaso, pasa de amarillo a rosita.
Teniendo la nata, no podría llamarla de light, pero bueno, está hecha de frutas y con edulcorante, con lo que reducimos también las calorías asociadas. Podéis quitar el caramelo y poner un yogur griego natural, seguro que os queda fantástico...
Ya me contaréis!
Tomates rellenos de salmón ahumado
De toda la vida en mi casa he visto hacer tomates rellenos, pero de atún. Y a veces lo hago por aqui, pero mirando Canal Cocina otro dia, vi esta receta en el programa de Julius (cocina en 22 minutos), el cual recomiendo muchísimo, hace cosas espectaculares y bastante asequibles.
Está bastante parecida y fiel a lo que ha hecho él, y quedó muy buena para esta época en que el calorcito ya empieza a hacer gala de su presencia.
Mirad que sencillo.
Ingredientes (ahi depende un poco para cuantos, yo os comento para tres tomates grandes, aqui somos pocos y para un entrante ya estuvo bien):
- 3 tomates del tipo "tomates verdes", para ensalada. Sí claro podéis usar los otros... yo creo que para ésto quedan mejor los de ensalada pero cada uno hace a su gusto.
- 1 yogur griego
- 1 paquete 150g de salmón ahumado
- unas 4 ramitas de cebollino, más algunas para decorar
- una cantidad similar de eneldo (yo acabé usando el seco, pero si teneis el natural, mucho mejor)
- 1/2 cucharadita de mostaza de dijon (eso ya fue invención mía)
- sal a gusto
¿Cómo se hace?
1. Quitar la tapita de arriba de los tomates y vaciarlos cuidadosamente, de pulpa y semillas. Mirad, es importante que los tomates se aguanten en pie para no tumbarse, por lo que si son demasiado redondos de abajo, quitarles tambien una pequeña lonchita de abajo para que esa parte quede plana. Para los míos no ha hecho falta.
2. Una vez vaciados, ponedles boca abajo sobre una hoja de papel de cocina, para que escurran bien. Ese paso aunque parece una tontería es importante, sino el agua del mismo tomate se mezclará con vuestro relleno y quedará todo muy "aguado". Un cuartito de hora de escurrir así.
3. Mientras transcurre este tiempo, preparar el relleno: en un plato o bol, mezclar el salmón cortado en trozos muy pequeñitos, el yogur, el cebollino cortado en trocitos, el eneldo idem, la mostaza de dijon, y luego rectificar de sal. Es importante probar un pelín antes de echar sal, porque ambos salmón y mostaza de dijon ya tienen un gusto bastante contundente. A según que paladares ni les hará falta sal, yo puse 1/4 de cucharita aproximadamente
4. Poner los tomates boca arriba en un plato, espolvorear su interior con una pizca de sal, y rellenar con vuestra mezcla del punto 3. Decorar con unas ramitas de cebollino.
Listo, en unos 20 minutitos tenéis vuestro entrante delicioso, sin apenas tener trabajo ni ensuciando casi nada.
Mirad como me han quedado que monos ;-)
Variantes posibles de éste plato? sustituir el yogur griego por queso light, añadir algo de mayonesa si os gusta... es para salir del típico tomate relleno de atun mezclado con mayonesa que, no obstante, también está muy bueno ;)
Salut!
Está bastante parecida y fiel a lo que ha hecho él, y quedó muy buena para esta época en que el calorcito ya empieza a hacer gala de su presencia.
Mirad que sencillo.
Ingredientes (ahi depende un poco para cuantos, yo os comento para tres tomates grandes, aqui somos pocos y para un entrante ya estuvo bien):
- 3 tomates del tipo "tomates verdes", para ensalada. Sí claro podéis usar los otros... yo creo que para ésto quedan mejor los de ensalada pero cada uno hace a su gusto.
- 1 yogur griego
- 1 paquete 150g de salmón ahumado
- unas 4 ramitas de cebollino, más algunas para decorar
- una cantidad similar de eneldo (yo acabé usando el seco, pero si teneis el natural, mucho mejor)
- 1/2 cucharadita de mostaza de dijon (eso ya fue invención mía)
- sal a gusto
¿Cómo se hace?
1. Quitar la tapita de arriba de los tomates y vaciarlos cuidadosamente, de pulpa y semillas. Mirad, es importante que los tomates se aguanten en pie para no tumbarse, por lo que si son demasiado redondos de abajo, quitarles tambien una pequeña lonchita de abajo para que esa parte quede plana. Para los míos no ha hecho falta.
2. Una vez vaciados, ponedles boca abajo sobre una hoja de papel de cocina, para que escurran bien. Ese paso aunque parece una tontería es importante, sino el agua del mismo tomate se mezclará con vuestro relleno y quedará todo muy "aguado". Un cuartito de hora de escurrir así.
3. Mientras transcurre este tiempo, preparar el relleno: en un plato o bol, mezclar el salmón cortado en trozos muy pequeñitos, el yogur, el cebollino cortado en trocitos, el eneldo idem, la mostaza de dijon, y luego rectificar de sal. Es importante probar un pelín antes de echar sal, porque ambos salmón y mostaza de dijon ya tienen un gusto bastante contundente. A según que paladares ni les hará falta sal, yo puse 1/4 de cucharita aproximadamente
4. Poner los tomates boca arriba en un plato, espolvorear su interior con una pizca de sal, y rellenar con vuestra mezcla del punto 3. Decorar con unas ramitas de cebollino.
Listo, en unos 20 minutitos tenéis vuestro entrante delicioso, sin apenas tener trabajo ni ensuciando casi nada.
Mirad como me han quedado que monos ;-)
Variantes posibles de éste plato? sustituir el yogur griego por queso light, añadir algo de mayonesa si os gusta... es para salir del típico tomate relleno de atun mezclado con mayonesa que, no obstante, también está muy bueno ;)
Salut!
dissabte, 13 d’abril del 2013
Patatas horneadas al ajo (tipo fritas)
Ya sé que los títulos cada vez estan peor! pero bueno es que muchas recetas las leo en páginas inglesas o americanas y la diferenciación que hacen ellos entre potato y fries, nosotros pues como que no tenemos que yo sepa.
Es decir: éstas patatas son del 'estilo' de patatas fritas, pero están hechas en el horno. Tengo que decir que la receta tarda un pelín más que hacer las patatas fritas habituales, pero VALE LA PENA. No solo por ahorrarnos freír las patatas y hacerlas un poco más sanitas, sino que estan deliciosas la verdad.
Ingredientes:
- 3 patatas grandes
- 5 cucharadas soperas de aceite de oliva
- 3 ajos cortados muy pequeñitos
Para sazonar:
- 1/4 cucharita de pimienta negra molida
- 1/2 cucharita de tomillo
- 1/2 cucharita de orégano
- 1 cucharita de pimentón picante
- 1/4 cucharita de cayena
- 1/2 cucharita de comino molido
- 1/2 cucharita de perejil
Para alioli:
- la verdad es que la receta ponía algo que no me ha convencido y hice el alioli de toda la vida, con aceite de girasol, huevo y 2 dientes de ajo cortaditos. (pero si os interesa, ellos hacian con 2 cucharadas soperas de mayonesa, 2 cucharadas soperas de yogurt griego y 1 diente de ajo machacado)
¿Cómo se hace?
1. Ir precalentando el horno a unos 250ºC. Dejad fuera la bandeja del horno y cubrir con papel vegetal.
2. Cortar las patatas (pelarlas o no es opcional, pero si dejáis la piel, lavadlas muy bien) en 'palitos' tipo para hacer patatas fritas normales. Es interesante que los tamaños queden muy homogéneos sino se harán de manera desigual. Dejar las patatas por lo menos media hora en un bol, cubiertas por agua tebia. Eso servirá para quitarles parte del almidón.
3. Mientras pasa ese tiempo, en una sarten pequeñita, poner 1 cucharada sopera de aceite con los ajos finamente picados. Fuego medio tirando a bajito.... no queremos que los ajos se quemen, solo que se doren un poco. Dejad 2 o 3 minutitos, y fuera. Sacad el ajo del aceite con una escumadera y reservad ambos.
4. Coger la bandeja cubierta con papel vegetal y esparcir 4 cucharadas soperas de aceite, 3/4 cucharita de sal y 1/4 cucharita de pimienta. Yo siempre pongo además un poco de sal marina, me encanta como queda.
5. Mientras hacéis todo eso, seguro que la media hora ya ha pasado. Secar MUY BIEN las patatas, entre dos hojas de papel de cocina. Necesitaréis varias hojas, para aseguraros que las patatas estan muy secas. Entre el remojo previo y eso, veréis que se conseguirá que estén muy crujientes. Devolvedlas al bol que debe estar también seco.
6. Hora de sazonar las patatas: añadirles la cucharada de aceite que habéis recervado de freir los ajos, y las especies "para sazonar", del listado arriba. Añadir solo el aceite, NO los ajos ok? Remover todo muy bien para que se integren y distribuyan de manera homogénea.
7. Disponer las patatas en una capa única (intentando no superponerlas) en la bandeja del horno. Cubrir con papel de plata y llevar al horno a 250ºC por unos 10 minutos. Luego quitar el papel de plata y seguir el horneado.
8. Las vais a seguir horneando durante unos 15-20 minutos (depende del horno y de la clase de la patata) hasta ver que se empiezan a poner ligeramente morenitas por debajo y las puntas. Ahi aconsejo darles la vuelta, removiendo y volviendo a acomodarlas, y también dar la vuelta a la bandeja del horno (ya sabéis que muchas veces el calor en la parte de atrás puede ser ligeramente distinto que en la parte de delante. Queremos que se hagan de manera homogénea. Después de darles la vuelta, pueden necesitar otro cuarto de hora de horneado. A partir de ahi es bueno irles pinchando o cogiendo alguna para ver como estan, aparte del color ligeramente morenito que van a tomar.
9. Mientras, se puede hacer el alioli: en un vaso alto, poner el aceite de girasol, el huevo y los 2 dientes de ajo cortadito (otros ajos, NO los que os hayan sobrado de freír, vale?). Batir con el robot, primero a velocidad muy baja, y luego irla subiendo poquito a poco.
10. Ya está: sacar las patatas de la bandeja del horno, añadirles los ajos que habéis reservado de freír en el punto 3 y presentarlas con el alioli! (sí es un plato que sabe bastante a ajo... si no os gusta, no es una buena opción).
Edito este post porque hoy las he vuelto a hacer, y ahora sí que hay foto:
Animaros y probado algo distinto :-)
Es decir: éstas patatas son del 'estilo' de patatas fritas, pero están hechas en el horno. Tengo que decir que la receta tarda un pelín más que hacer las patatas fritas habituales, pero VALE LA PENA. No solo por ahorrarnos freír las patatas y hacerlas un poco más sanitas, sino que estan deliciosas la verdad.
Ingredientes:
- 3 patatas grandes
- 5 cucharadas soperas de aceite de oliva
- 3 ajos cortados muy pequeñitos
Para sazonar:
- 1/4 cucharita de pimienta negra molida
- 1/2 cucharita de tomillo
- 1/2 cucharita de orégano
- 1 cucharita de pimentón picante
- 1/4 cucharita de cayena
- 1/2 cucharita de comino molido
- 1/2 cucharita de perejil
Para alioli:
- la verdad es que la receta ponía algo que no me ha convencido y hice el alioli de toda la vida, con aceite de girasol, huevo y 2 dientes de ajo cortaditos. (pero si os interesa, ellos hacian con 2 cucharadas soperas de mayonesa, 2 cucharadas soperas de yogurt griego y 1 diente de ajo machacado)
¿Cómo se hace?
1. Ir precalentando el horno a unos 250ºC. Dejad fuera la bandeja del horno y cubrir con papel vegetal.
2. Cortar las patatas (pelarlas o no es opcional, pero si dejáis la piel, lavadlas muy bien) en 'palitos' tipo para hacer patatas fritas normales. Es interesante que los tamaños queden muy homogéneos sino se harán de manera desigual. Dejar las patatas por lo menos media hora en un bol, cubiertas por agua tebia. Eso servirá para quitarles parte del almidón.
3. Mientras pasa ese tiempo, en una sarten pequeñita, poner 1 cucharada sopera de aceite con los ajos finamente picados. Fuego medio tirando a bajito.... no queremos que los ajos se quemen, solo que se doren un poco. Dejad 2 o 3 minutitos, y fuera. Sacad el ajo del aceite con una escumadera y reservad ambos.
4. Coger la bandeja cubierta con papel vegetal y esparcir 4 cucharadas soperas de aceite, 3/4 cucharita de sal y 1/4 cucharita de pimienta. Yo siempre pongo además un poco de sal marina, me encanta como queda.
5. Mientras hacéis todo eso, seguro que la media hora ya ha pasado. Secar MUY BIEN las patatas, entre dos hojas de papel de cocina. Necesitaréis varias hojas, para aseguraros que las patatas estan muy secas. Entre el remojo previo y eso, veréis que se conseguirá que estén muy crujientes. Devolvedlas al bol que debe estar también seco.
6. Hora de sazonar las patatas: añadirles la cucharada de aceite que habéis recervado de freir los ajos, y las especies "para sazonar", del listado arriba. Añadir solo el aceite, NO los ajos ok? Remover todo muy bien para que se integren y distribuyan de manera homogénea.
7. Disponer las patatas en una capa única (intentando no superponerlas) en la bandeja del horno. Cubrir con papel de plata y llevar al horno a 250ºC por unos 10 minutos. Luego quitar el papel de plata y seguir el horneado.
8. Las vais a seguir horneando durante unos 15-20 minutos (depende del horno y de la clase de la patata) hasta ver que se empiezan a poner ligeramente morenitas por debajo y las puntas. Ahi aconsejo darles la vuelta, removiendo y volviendo a acomodarlas, y también dar la vuelta a la bandeja del horno (ya sabéis que muchas veces el calor en la parte de atrás puede ser ligeramente distinto que en la parte de delante. Queremos que se hagan de manera homogénea. Después de darles la vuelta, pueden necesitar otro cuarto de hora de horneado. A partir de ahi es bueno irles pinchando o cogiendo alguna para ver como estan, aparte del color ligeramente morenito que van a tomar.
9. Mientras, se puede hacer el alioli: en un vaso alto, poner el aceite de girasol, el huevo y los 2 dientes de ajo cortadito (otros ajos, NO los que os hayan sobrado de freír, vale?). Batir con el robot, primero a velocidad muy baja, y luego irla subiendo poquito a poco.
10. Ya está: sacar las patatas de la bandeja del horno, añadirles los ajos que habéis reservado de freír en el punto 3 y presentarlas con el alioli! (sí es un plato que sabe bastante a ajo... si no os gusta, no es una buena opción).
Edito este post porque hoy las he vuelto a hacer, y ahora sí que hay foto:
Animaros y probado algo distinto :-)
Pseudo-pizza con base de coliflor
Ya sé que el título suena a algo un poco sui generis para decir lo mínimo, pero no sé muy bien como llamarla. El título original estaba en inglés y la traducción no queda muy bien - porque no es una "pizza DE coliflor" sino "sobre coliflor".
Hay maneras de disminuirle un poco las calorías. Yo no tenía ni intención ni tiempo, pero como veréis mi sugerencia al final, sí se puede. Además, aunque a mi me faltaba un ingrediente y lo hice sin él, os recomiendo ponerlo (ya os diré), porque seguro que queda mejor.
Ésta pseudo-pizza no queda muy grande, por lo que quizás os puede servir como entrante para 2, 3 personas pero no como plato único. Ok?
Ingredientes:
'Masa' de la pizza
- 1 coliflor. Sí va a sobrar un poco... no la vais a usar toda. Para ser más exactos pues sería unos 3/4 de coliflor pero es un poco surrealista esa medida. Usad toda, y guardáis lo que sobre para ponerlo en otra receta.
- 1 huevo batido (ésto es lo que yo no tenía, se me habían acabado y era tarde para salir a comprar; para salvarme puse unos 50-70ml de leche, un poco "a ojo"). Está claro que no es lo mismo, así que os recomiendo fuertemente hacerla con huevo.
- 1/2 taza de queso parmesano rallado y 1/2 taza de mozzarella rallado (yo en efecto, en lugar de mozzarella, usé una mezcla de 4 quesos rallados para gratinar que compro en el super). Guardad también un poco para espolvorear el topping.
- 1 ajo 'machacado'
- 1/2 cucharita de sal (y además usé 1/2 cucharita generosa de sazonador de espaguetis, que compro listo en el super; por supuesto no es indispensable, usad otras especies como orégano, pimienta negra, comino...)
'Topping' de la pizza
Esto ya va muy a gusto de cada uno. Yo usé unos 200g de carne picada, un puñado de aceitunas negras troceadas, un poco de salsa de tomate (solo para darle homogeneidad, sin exagerar), un chorrito muy pequeñito de nata, todo eso sazonado con sal, pimienta negra, una pizca pequeñita de cayena y un poco de perejil (todo eso a fuego medio en la sartén mientras se hacía la 'masa' de la pizza en el horno).
¿Cómo se hace?
Masa:
1. Precalentar el horno a 225ºC. Dejar fuera la bandeja del horno y prepararla con papel de hornear rociado con spray 'bake easy', o un poquito de aceite, muy poquito solo para que no se pegue la masa.
2. La receta original decía en inglés "rice the cauliflower"... eso me dejó pensando qué era, hasta leer su explicación: reducirla, aún cruda, a pedazos muy pequeñitos equivalentes a granitos de arroz. Para ésto, cortad la coliflor en sus ramitas, y la pasáis por el procesador de alimentos hasta conseguir esta textura. Si no disponéis de procesador, sugiero usar el rallador, que también debería servir.
3. Una vez la tenéis troceada así, la pondréis en el microondas a potencia alta, por unos 6-7 minutos. No hace falta poner agua.
4. Cuando esto esté, mezclar lo equivalente 1 + 1/2 taza de la coliflor 'granulada' con el queso rallado, el ajo machacado y la sal y otras especies (y el huevo batido!! si podéis, no utilicéis leche como hice yo). Eso será vuestra 'masa'. Es bastante 'manejable' ya veréis, no se escurre. Así que formáis una bola con ella, y la aplastáis sobre la bandeja y el papel de horno. Yo la dejaría como de 0,5 cm aproximadamente. Más fina puede ser que se acabe quemando y haga agujeritos, sin quedar íntegra. Hornearla a 225ºC durante aproximadamente 15 minutos, pero ojo en ella para que no se torre demasiado. Empezaréis a ver los bordes morenitos, así está bien.
Topping
5. Mientras se hace la masa, hacer el topping, primero friendo la carne picada y luego mezclando los demás ingredientes. Aqui, creatividad, también podéis usar otras cosas, quizás algo de bacon, champiñones.... o quitarle totalmente la carne, haciendo con cebolla, champiñones, aceitunas, pimientos, alcachofas...
6. Sacar la base del horno y añadir el topping, espolvoreando con queso rallado. A partir de aqui, volverá al horno con calor solo por arriba, lo justo para derretir el queso. Si dejáis demasiado, la base acabará quemándose. Para que sea más manejable, es interesante que se enfríe un poquito antes de cortarla.
Y ya está! No sabía si iba a quedar bueno haciendo mi experimento y la foto que hice es un poco feúcha. Dado que la hice sin huevo, su 'masa' no quedó tan íntegra como de una pizza normal, sino un poco más blandita. Pero es muy sorprendente notar el gusto de la coliflor en la base, y una manera de hacerlo distinto.
Podemos disminuir las calorias si usamos queso con bajo teor de grasa, y quitamos la nata del topping poniendo un poco más de salsa de tomate en su lugar. Y también sustituyendo la carne por vegetales, como mencioné más arriba.
Mirad :-) con perdón de la mala foto, la verdad es que quedó muy buena de gusto.
Esto era aproximadamente la mitad de la 'pseudopizza', llenando un plato grande.
Os invito a probar nuevas formas de hacer las cosas, es una manera distinta y algo más divertida de tomar coliflor, y hasta los que no son muy fans de ésta seguro que lo aprecian!
Salut ;-)
Hay maneras de disminuirle un poco las calorías. Yo no tenía ni intención ni tiempo, pero como veréis mi sugerencia al final, sí se puede. Además, aunque a mi me faltaba un ingrediente y lo hice sin él, os recomiendo ponerlo (ya os diré), porque seguro que queda mejor.
Ésta pseudo-pizza no queda muy grande, por lo que quizás os puede servir como entrante para 2, 3 personas pero no como plato único. Ok?
Ingredientes:
'Masa' de la pizza
- 1 coliflor. Sí va a sobrar un poco... no la vais a usar toda. Para ser más exactos pues sería unos 3/4 de coliflor pero es un poco surrealista esa medida. Usad toda, y guardáis lo que sobre para ponerlo en otra receta.
- 1 huevo batido (ésto es lo que yo no tenía, se me habían acabado y era tarde para salir a comprar; para salvarme puse unos 50-70ml de leche, un poco "a ojo"). Está claro que no es lo mismo, así que os recomiendo fuertemente hacerla con huevo.
- 1/2 taza de queso parmesano rallado y 1/2 taza de mozzarella rallado (yo en efecto, en lugar de mozzarella, usé una mezcla de 4 quesos rallados para gratinar que compro en el super). Guardad también un poco para espolvorear el topping.
- 1 ajo 'machacado'
- 1/2 cucharita de sal (y además usé 1/2 cucharita generosa de sazonador de espaguetis, que compro listo en el super; por supuesto no es indispensable, usad otras especies como orégano, pimienta negra, comino...)
'Topping' de la pizza
Esto ya va muy a gusto de cada uno. Yo usé unos 200g de carne picada, un puñado de aceitunas negras troceadas, un poco de salsa de tomate (solo para darle homogeneidad, sin exagerar), un chorrito muy pequeñito de nata, todo eso sazonado con sal, pimienta negra, una pizca pequeñita de cayena y un poco de perejil (todo eso a fuego medio en la sartén mientras se hacía la 'masa' de la pizza en el horno).
¿Cómo se hace?
Masa:
1. Precalentar el horno a 225ºC. Dejar fuera la bandeja del horno y prepararla con papel de hornear rociado con spray 'bake easy', o un poquito de aceite, muy poquito solo para que no se pegue la masa.
2. La receta original decía en inglés "rice the cauliflower"... eso me dejó pensando qué era, hasta leer su explicación: reducirla, aún cruda, a pedazos muy pequeñitos equivalentes a granitos de arroz. Para ésto, cortad la coliflor en sus ramitas, y la pasáis por el procesador de alimentos hasta conseguir esta textura. Si no disponéis de procesador, sugiero usar el rallador, que también debería servir.
3. Una vez la tenéis troceada así, la pondréis en el microondas a potencia alta, por unos 6-7 minutos. No hace falta poner agua.
4. Cuando esto esté, mezclar lo equivalente 1 + 1/2 taza de la coliflor 'granulada' con el queso rallado, el ajo machacado y la sal y otras especies (y el huevo batido!! si podéis, no utilicéis leche como hice yo). Eso será vuestra 'masa'. Es bastante 'manejable' ya veréis, no se escurre. Así que formáis una bola con ella, y la aplastáis sobre la bandeja y el papel de horno. Yo la dejaría como de 0,5 cm aproximadamente. Más fina puede ser que se acabe quemando y haga agujeritos, sin quedar íntegra. Hornearla a 225ºC durante aproximadamente 15 minutos, pero ojo en ella para que no se torre demasiado. Empezaréis a ver los bordes morenitos, así está bien.
Topping
5. Mientras se hace la masa, hacer el topping, primero friendo la carne picada y luego mezclando los demás ingredientes. Aqui, creatividad, también podéis usar otras cosas, quizás algo de bacon, champiñones.... o quitarle totalmente la carne, haciendo con cebolla, champiñones, aceitunas, pimientos, alcachofas...
6. Sacar la base del horno y añadir el topping, espolvoreando con queso rallado. A partir de aqui, volverá al horno con calor solo por arriba, lo justo para derretir el queso. Si dejáis demasiado, la base acabará quemándose. Para que sea más manejable, es interesante que se enfríe un poquito antes de cortarla.
Y ya está! No sabía si iba a quedar bueno haciendo mi experimento y la foto que hice es un poco feúcha. Dado que la hice sin huevo, su 'masa' no quedó tan íntegra como de una pizza normal, sino un poco más blandita. Pero es muy sorprendente notar el gusto de la coliflor en la base, y una manera de hacerlo distinto.
Podemos disminuir las calorias si usamos queso con bajo teor de grasa, y quitamos la nata del topping poniendo un poco más de salsa de tomate en su lugar. Y también sustituyendo la carne por vegetales, como mencioné más arriba.
Mirad :-) con perdón de la mala foto, la verdad es que quedó muy buena de gusto.
Esto era aproximadamente la mitad de la 'pseudopizza', llenando un plato grande.
Os invito a probar nuevas formas de hacer las cosas, es una manera distinta y algo más divertida de tomar coliflor, y hasta los que no son muy fans de ésta seguro que lo aprecian!
Salut ;-)
"Plum cake" de plátano
Esa no es la unica recepta de repostería con plátano, en efecto... creo que es una fruta muy palatable que queda muy bien con casi todo. Claro que también es una de las que más azúcar tiene, por lo que si tenéis problemas con ésto, seria mejor optar por otra fruta. Pero este pastelito era para un cumpleaños de una compañera de trabajo, y podíamos hacerlo con todo el azúcar a que teníamos derecho!
Ésta vez, aunque yo hubiera querido unos plátanos más maduritos, no los tenía así y al buscarlos en el super, pues estaban maduros pero no tanto como yo quisiera. Igualmente os digo que quedó bueno y que no importa mucho en ese caso, usad los que tengáis siempre que no esten verdes claro.
Fue rapidito de hacer y quedó muy bien, aqui va. En teoria es más o menos la receta 1-2-3 pero la cambié ligeramente.
Ingredientes: (os dará para un molde estándar de plum cake)
- 2 huevos
- 1 yogur natural (a mi me gusta mucho usar el yogur griego para éstas cosas)
- 1/2 medida de yogur de leche de coco (no es indispensable, desde luego medio inventé porque lo tenía a mano, pero le dio un toque realmente aterciopelado al gusto...pero podeis poner 3 huevos en lugar de 2, y quitar esto)
- 2 medidas de yogur de azúcar
- 1 medida de yogur de aceite de girasol (yo evitaría el de oliva, porque puede dar un gusto demasiado fuerte)
- 3 medidas de yogur de harina (yo usé toda integral en ese caso)
- 1/2 sobre de levadura
- 2 plátanos cortados en trozos pequeños
¿Cómo se hace?
1. Precalentar el horno a 180ºC. Como en algun post os comenté, la temperatura estable y correcta, y los primeros 30 minutos sin abrir el horno bajo ningún concepto, son indispensables para que el pastel os crezca bien y de manera regular.
2. En un bol, batir los huevos y el azúcar, hasta que quede muy clarito. Después, añadir el aceite de oliva, el yogur y la leche de coco, y seguir batiendo un ratito más.
3. En un recipiente aparte, mezclar la harina y la levadura. Os cuento que intenté tamizar la harina integral, pero no era consciente que algunas partículas no pasarían el tamiz, así que finalmente aproveché todo, y listo. Sin tamizar. Incorporar ésto sobre la mezcla que teníais del punto 2. Mezclar bien hasta que esté todo bien integrado. Ya por último, añadir el plátano cortadito, y mezclar.
4. Coger el molde de plum cake y rociarlo con spray tipo "bake easy", para desmoldar. En serio es lo mejor que hay para esto!! pero bueno tampoco es indispensable: si no teneis, pues lo de siempre. Untar con mantequilla y espolvorear con harina. También os servirá. Pero si podéis haceros con ese tipo de spray, es una maravilla de práctico y dura muchisimo. Llenar el molde de plum cake con la mezcla del punto 3, y llevarlo al horno que ya debe estar estable a 180º. Si no lo está, ESPERAD a que esté.
5. Lo hornearemos a esta temperatura, a media altura y con calor arriba y abajo, durante unos 40-50 minutos dependiendo del horno. Durante la primera media hora, NI PENSAR en abrir el horno. A los 40 minutos podéis hacer la prueba del palillo para decidir si dejar más o no.
Yo nunca lo saco de cuajo corriendo del horno. Lo dejo un ratito con el horno apagado, luego con la puerta abierta, y ya por último lo saco. Unos minutitos fuera, y luego desmoldar.Si no véis claro, pasarle un cuchillo de bordes redondos delicadamente por las paredes, antes. Y luego a enfriar sobre una rejilla: no dejéis sobre un plato porque hará vapor, humedad y dejará el pastelito muy blando en su parte de abajo.
Cuando estaba aún caliente, lo espolvoreé con un poco de azúcar glas y canela, pero eso es totalmente opcional.
Mirad como ha quedado!
Ahi lo teneis, en una horita y media aproximadamente, algo adorable para un te, café, merienda...
Salut!
Ésta vez, aunque yo hubiera querido unos plátanos más maduritos, no los tenía así y al buscarlos en el super, pues estaban maduros pero no tanto como yo quisiera. Igualmente os digo que quedó bueno y que no importa mucho en ese caso, usad los que tengáis siempre que no esten verdes claro.
Fue rapidito de hacer y quedó muy bien, aqui va. En teoria es más o menos la receta 1-2-3 pero la cambié ligeramente.
Ingredientes: (os dará para un molde estándar de plum cake)
- 2 huevos
- 1 yogur natural (a mi me gusta mucho usar el yogur griego para éstas cosas)
- 1/2 medida de yogur de leche de coco (no es indispensable, desde luego medio inventé porque lo tenía a mano, pero le dio un toque realmente aterciopelado al gusto...pero podeis poner 3 huevos en lugar de 2, y quitar esto)
- 2 medidas de yogur de azúcar
- 1 medida de yogur de aceite de girasol (yo evitaría el de oliva, porque puede dar un gusto demasiado fuerte)
- 3 medidas de yogur de harina (yo usé toda integral en ese caso)
- 1/2 sobre de levadura
- 2 plátanos cortados en trozos pequeños
¿Cómo se hace?
1. Precalentar el horno a 180ºC. Como en algun post os comenté, la temperatura estable y correcta, y los primeros 30 minutos sin abrir el horno bajo ningún concepto, son indispensables para que el pastel os crezca bien y de manera regular.
2. En un bol, batir los huevos y el azúcar, hasta que quede muy clarito. Después, añadir el aceite de oliva, el yogur y la leche de coco, y seguir batiendo un ratito más.
3. En un recipiente aparte, mezclar la harina y la levadura. Os cuento que intenté tamizar la harina integral, pero no era consciente que algunas partículas no pasarían el tamiz, así que finalmente aproveché todo, y listo. Sin tamizar. Incorporar ésto sobre la mezcla que teníais del punto 2. Mezclar bien hasta que esté todo bien integrado. Ya por último, añadir el plátano cortadito, y mezclar.
4. Coger el molde de plum cake y rociarlo con spray tipo "bake easy", para desmoldar. En serio es lo mejor que hay para esto!! pero bueno tampoco es indispensable: si no teneis, pues lo de siempre. Untar con mantequilla y espolvorear con harina. También os servirá. Pero si podéis haceros con ese tipo de spray, es una maravilla de práctico y dura muchisimo. Llenar el molde de plum cake con la mezcla del punto 3, y llevarlo al horno que ya debe estar estable a 180º. Si no lo está, ESPERAD a que esté.
5. Lo hornearemos a esta temperatura, a media altura y con calor arriba y abajo, durante unos 40-50 minutos dependiendo del horno. Durante la primera media hora, NI PENSAR en abrir el horno. A los 40 minutos podéis hacer la prueba del palillo para decidir si dejar más o no.
Yo nunca lo saco de cuajo corriendo del horno. Lo dejo un ratito con el horno apagado, luego con la puerta abierta, y ya por último lo saco. Unos minutitos fuera, y luego desmoldar.Si no véis claro, pasarle un cuchillo de bordes redondos delicadamente por las paredes, antes. Y luego a enfriar sobre una rejilla: no dejéis sobre un plato porque hará vapor, humedad y dejará el pastelito muy blando en su parte de abajo.
Cuando estaba aún caliente, lo espolvoreé con un poco de azúcar glas y canela, pero eso es totalmente opcional.
Mirad como ha quedado!
Ahi lo teneis, en una horita y media aproximadamente, algo adorable para un te, café, merienda...
Salut!
diumenge, 7 d’abril del 2013
Tarta de queso sobre base de galleta
Bueno, esa tarta lo vi en un enlace de Isabel Llanos, la famosa Isasaweis, que tiene recetas estupendas de todo (cocina, belleza, etc). Solo con ver la receta la verdad te quedas prendada de la tarta, y estaba esperando el momento de hacerla.
Pero bueno, sucedió que la quería hacer sin azúcar, o lo máximo sin azúcar posible... y que cuando se dio la oportunidad de hacerla, me faltaba algun ingrediente, que lo sustituí según mi criterio. Así que lo que os voy a contar es como lo hice, y la original la podeis encontrar en la página de Isasaweis.
Ingredientes: (tarta pequeña)
- 1/2 paquete de galletas 'digestive' sin azúcares añadidos (por supuesto podéis usar otras, como las Marbu de toda la vida, yo es que intento que llegue aqui el mínimo azúcar posible)
- 40g mantequilla sin sal
- 1 chorrito de vino blanco (si es ligeramente dulce, mejor)
- 150g de queso fresco tipo Philadelphia
- 100ml de nata (35% m.g.)
- 1 yogur griego
- 1 huevo
- 1/4 paquete de queso rallado (yo usé emmental)
- 2 cucharadas soperas colmadas de edulcorante líquido
También vais a necesitar un molde de pastel de estos de aro, desmontable. Yo uso uno pequeñito, de 18cm de diámetro, dado que somos pocos y mejor que no sobre mucho. Pero si sois más, ir a un molde más grande y doblad todo de la receta.
¿Cómo se hace?
1. Precalentar el horno a 180ºC.
2. Base de la tarta: triturar el 1/2 paquete de galletas, bien fino (con un robot de cocina, mejor). Mezclarlo con los 40g de mantequilla derretidos en el microondas, y un chorrito de vino blanco. Incorporar todo hasta que quede una especie de masa húmeda. Preparar el molde de aro poniendo papel vegetal (o de horno) en el fondo, y cubriendo éste fondo con la masa de galleta. Subirla un poquito también por las paredes del molde.
3. Parte superior de la tarta: los restantes ingredientes, mezclarlos todos en un bol (el orden de los ingredientes no es importante en este caso) y batirlos muy bien - el túrmix ya os servirá. Depositarlo encima de la base de la tarta y llevar al horno durante aproximadamente 1h a 180ºC con calor arriba y abajo
4. Luego IMPORTANTE: apagar el horno y abrir la puerta PERO NO SACAR LA TARTA. La vais a dejar alli unos 20 min más y solo después de este tiempo sacarla fuera.
5. Cuando ya haya alcanzado la temperatura ambiente, desmoldar. Yo he creído conveniente pasar un cuchillo de punta redonda, suavemente por los costados por si hubiera algo un poco adherido. Luego abrir el anillo del molde normalmente y llevar la tarta a la nevera, yo recomiendo overnight.
Y ya está!! habéis visto que facil?
Mirad que chula ha quedado:
Disminuimos las calorias quitando el azúcar y sustituyendo las galletas. No es caloria 'cero' ni tampoco muy diet que digamos... lleva nata, lleva mantequilla, pero bueno, sabéis que? todo es comer con moderación. A mi me encantó y espero que a vosotros también. Salut!
Pero bueno, sucedió que la quería hacer sin azúcar, o lo máximo sin azúcar posible... y que cuando se dio la oportunidad de hacerla, me faltaba algun ingrediente, que lo sustituí según mi criterio. Así que lo que os voy a contar es como lo hice, y la original la podeis encontrar en la página de Isasaweis.
Ingredientes: (tarta pequeña)
- 1/2 paquete de galletas 'digestive' sin azúcares añadidos (por supuesto podéis usar otras, como las Marbu de toda la vida, yo es que intento que llegue aqui el mínimo azúcar posible)
- 40g mantequilla sin sal
- 1 chorrito de vino blanco (si es ligeramente dulce, mejor)
- 150g de queso fresco tipo Philadelphia
- 100ml de nata (35% m.g.)
- 1 yogur griego
- 1 huevo
- 1/4 paquete de queso rallado (yo usé emmental)
- 2 cucharadas soperas colmadas de edulcorante líquido
También vais a necesitar un molde de pastel de estos de aro, desmontable. Yo uso uno pequeñito, de 18cm de diámetro, dado que somos pocos y mejor que no sobre mucho. Pero si sois más, ir a un molde más grande y doblad todo de la receta.
¿Cómo se hace?
1. Precalentar el horno a 180ºC.
2. Base de la tarta: triturar el 1/2 paquete de galletas, bien fino (con un robot de cocina, mejor). Mezclarlo con los 40g de mantequilla derretidos en el microondas, y un chorrito de vino blanco. Incorporar todo hasta que quede una especie de masa húmeda. Preparar el molde de aro poniendo papel vegetal (o de horno) en el fondo, y cubriendo éste fondo con la masa de galleta. Subirla un poquito también por las paredes del molde.
3. Parte superior de la tarta: los restantes ingredientes, mezclarlos todos en un bol (el orden de los ingredientes no es importante en este caso) y batirlos muy bien - el túrmix ya os servirá. Depositarlo encima de la base de la tarta y llevar al horno durante aproximadamente 1h a 180ºC con calor arriba y abajo
4. Luego IMPORTANTE: apagar el horno y abrir la puerta PERO NO SACAR LA TARTA. La vais a dejar alli unos 20 min más y solo después de este tiempo sacarla fuera.
5. Cuando ya haya alcanzado la temperatura ambiente, desmoldar. Yo he creído conveniente pasar un cuchillo de punta redonda, suavemente por los costados por si hubiera algo un poco adherido. Luego abrir el anillo del molde normalmente y llevar la tarta a la nevera, yo recomiendo overnight.
Y ya está!! habéis visto que facil?
Mirad que chula ha quedado:
Disminuimos las calorias quitando el azúcar y sustituyendo las galletas. No es caloria 'cero' ni tampoco muy diet que digamos... lleva nata, lleva mantequilla, pero bueno, sabéis que? todo es comer con moderación. A mi me encantó y espero que a vosotros también. Salut!
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